Caitlin Clark se convirtió oficialmente en jugadora profesional de la WNBA luego de ser elegida en el draft por el Indiana Fever.

NUEVA YORK - Caitlin Clark es oficialmente jugadora profesional.

Clark, la cara récord del baloncesto universitario femenino, fue seleccionada en el puesto número 1 general por las Indiana Fever en el draft de la WNBA de 2024 este lunes por la noche en la Academia de Música de Brooklyn.

La guardia de 6 pies 0 pulgadas (1.82m) y nativa de West Des Moines, Iowa, ingresa a la liga en la cima del mundo. Clark, dos veces jugadora nacional del año, terminó su carrera universitaria con 3,951 puntos, la mayor cantidad en la historia de la División I masculina y femenina, mientras impulsó a los Iowa Hawkeyes a apariciones consecutivas en juegos por el título nacional, las primeras en la historia del programa.

Sus triples con el logo, sus asistencias destacadas y su potencia ofensiva (promedió 31.6 puntos por partido en su último año y 28.4 puntos en su carrera) han atraído multitudes en Iowa City y fuera de casa, al tiempo que han destrozado los ratings de televisión y plataformas de streaming a lo largo del camino.

Tiene su propia caja de cereal, comerciales de State Farm y el fin de semana pasado apareció como ella misma en "Saturday Night Live". Ahora le espera su mayor desafío y su mayor oportunidad.

Las Fever no han aparecido en los playoffs desde 2016, la última temporada del legendario Tamika Catchings. Pero con Clark uniendo fuerzas con la selección general número 1 del año pasado en Aliyah Boston, la pareja de poderes generacionales parece destinada a cambiar la trayectoria de la franquicia, y posiblemente de la liga, para los próximos años.

Indiana, ganadora del título de la WNBA de 2012, ha languidecido desde el retiro de Catchings, luciendo el peor porcentaje de victorias de la liga desde el inicio de la temporada 2017 a pesar de seleccionar selecciones de lotería en cada uno de los últimos siete drafts. Cuatro de esas siete selecciones ya no están con el equipo.

Las señales de progreso surgieron la temporada pasada con Boston, la primera selección número uno de la franquicia, a cuestas, ya que ganaron 13 juegos, empatando la mayor cantidad desde el retiro de Catchings. Con Clark ahora en la mezcla, parece estar al alcance de la franquicia romper lo que actualmente es la racha activa más larga de la liga sin llegar a los playoffs.

Clark, la única jugadora de la División I con más de 3.000 puntos y 1.000 asistencias, tendrá dos objetivos de poste igualmente jóvenes pero de élite en Boston, la actual novata del año, y NaLyssa Smith, una elección de lotería de 2022. Después de que Clark desarrolló una fuerte química con las publicaciones de Iowa, Monika Czinano y Hannah Stuelke, las conexiones que ella, Boston y Smith pueden formar en Indianápolis son perspectivas tentadoras para los fanáticos de Fever.

Clark también compartirá la zona de defensa con dos escoltas veteranas: Kelsey Mitchell, número 4 en la lista de anotadores de todos los tiempos de la División I de la NCAA y una de los mejores tiradoras de triples de la liga la temporada pasada, además de la base armadora que regresa, Erica Wheeler.