Jerome Williams ha jugado en todo el mundo, y en casi todas las paradas, siempre ha pedido el mismo número, sin saber si lo tendría. Mientras jugaba en Puerto Rico, fue el segundo en pedir su núero, y el jugador que estaba frente a él escogió el No. 40.
De inmediato Williams pidió el No. 42, y el colega que pidió el No. 40 le preguntó la razón.
"Jackie Robinson," dijo Williams.
"Oh, rayos, se me olvidó," dijo su compañero, comenzando de inmediato a lamentarse por no haberlo hecho..
El lanzador de los Angelinos había utilizado el No. 42 en México, en Taiwan y mientras jugaba en las ligas independientes. Así que esta noche será una noche grande para él.
"Es mi primera salida ante los Yankees, la primera vez en Yankee Stadium," dijo el sábado, sentado frente a su casilero. "Y es la primera vez que usaré el 42 aquí [en Grandes Ligas]."
Mariano Rivera es el último pelotero activo que utiliza el No. 42, y una vez se retire, el único día en el que un pelotero lo podrá utilizar es el 15 de abril de cada temporada -- el día en el que cada jugador lo usa en honor a Robinson. El primer número que se le asignó a Rivera en el entrenamiento de los Yankees, como lanzador joven, fue el No. 58. Rivera no es de los que le gusta andar pidiendo; le asignaron el No. 42, y en ese momento, según nos dijo, no recordó la conexión con Robinson.
Pero en 1997, las Grandes Ligas retiraron el número, y los únicos que pudieron seguirlo usando fueron aquellos que ya lo tenían como Rivera. Un par de temporada más tarde, la viuda de Robinson, Rachel Robinson, le pidió a Rivera que participara en un evento, y él recuerda haber hablado con ellla sobre Jackie y el número. "Para mí, ser el último en utilizarlo es un honor," dijo Rivera. "Pero además es una gran responsabilidad. Uno tiene que llevarlo con mucho orgullo."
Mientras se criaba en Filadelfia, Reggie Jackson recuerda haber ido al Shibe Park y ver jugar a Robinson, sin poder despegar los ojos del Dodger. Entonces, luego del juego, Jackson -- quien piensa que tenía como 7 u 8 años en aquel momento -- recuerda haber esperado al jugador en las afueras del camerino visitante. "Estaba arrodillado, y entonces miré hacia arriba," dijo Jackson.
Y ahí estaba Jackie Robinson.
Dos décadas más tarde, el 15 de octubre de 1972, Jackson estaba en muletas, mientras los Atléticos de Oakland se preparaban para jugar el Juego 2 de la Serie Mundial ante los Rojos. Robinson fue presentado y llegó al micrófono, y hasta la fecha, Jackson tiene un recuerdo claro de lo que dijo Robinson aquel día.
Nueve días más tarde, Robinson falleció.
Este es un día para honrar al mejor pionero en el béisbol, según dice Martin Fennelly.
Años antes de que Robinson jugara en las mayores, Branch Rickey fue movido por las lágrimas de un receptor, según escribe Chris Lamb.