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¿Se queda Nash? (segunda parte)

Steve Nash tendrá que evaluar muchos aspectos más allá del dinero antes de salir de Phoenix Barry Gossage/NBAE/Getty Images

NUEVA YORK -- Steve Nash es agente libre y el 1 de julio comienza el período donde puede comenzar a negociar con otros equipos. En la primera parte de esta nota, explicamos las distintas razones que atan a Nash a Phoenix. A continuación, detallamos cómo el tratamiento médico y físico podría convertirse en un factor importante en su permanencia en el Valle del Sol.

En el caso de Nash, comenta el afamado y reconocido kinesiólogo Aaron Nelson de los Suns: "tiene espondilosis y cada vez que sufre un pequeño, pequeñísimo cambio en su manera de moverse, suceden todo tipo de cosas. Le pude afectar desde el hombro hasta los isquio-tibiales y pies, así que él es sumamente cumplidor en cuanto a su acondicionamiento y en cuanto a completar el régimen como es debido".

"Cuando se ausenta de un partido es porque entiende que su cuerpo lo necesita. No hace lo que intentan otros atletas de jugar hasta lesionarse y tener que descansar por un período más largo. Él sabe cuán lejos puede ir antes de decirnos: 'Necesito una pausa para reajustar lo que hacemos y volver a la normalidad'", apunta Nelson.

Nelson añade que "siente el impacto de los golpes fuertes, y luego percibe cómo no puede frenar como siempre, o cómo cuando tira al aro se desplaza, así que capta los cambios más pequeños en su cuerpo, y lo hemos estado observando y estudiando por ocho años. El aficionado ve a Nash jugar cansado o fallando sus tiros; nosotros entendemos la razón por qué'" remata Nelson.

Schwartz cita un estudio de un blog dedicado a los Milwaukee Bucks llamado BrewHoop.com que detalla que a través de los últimos 11 temporadas, sólo San Antonio y los Detroit Pistons han sumado menos ausencias de jugadores que los Suns durante la estadía de Nelson como kinesiólogo del equipo.

El más reciente juguete de Nelson, hoy en día usado por una media docena de equipos en la NBA es el tanque de crioterapia. El jugador se desnuda y se inserta en un tanque que lo expone a la temperatura generada por nitrógeno líquido a -170 grados centígrados (274 grados bajo cero Fahrenheit).

El criosauna, que cuesta $50,000, causa un shock de temperatura que hace que la sangre del jugador se concentre en sus entrañas, donde hay más nutrición y oxígeno. Reemplaza el baño de hielo de 12 minutos, aunque en el caso de ciertos jugadores, lo complementa. Nash y sus compañeros lo usan antes, después de los partidos o cuando se sientan inusualmente cansados.

Nelson no es la última gaseosa en el desierto, pero Nash debe dudar si hallará a alguien que no solo conozca las sutilezas de su cuerpo de 38 años de edad, sino que también tenga la inquietud intelectual de continuar innovando técnicas que extienden carreras.

"Phoenix será uno de los equipos que considere en la agencia libre, de seguro. Aprovecharé la oportunidad de evaluar las oportunidades que se puedan presentar y me tomaré mi tiempo en decidir", dice el armador futuro miembro del Salón de la fama.

Los Suns han estudiado los ciclos de generaciones de jugadores que pasan por franquicias de NBA y estiman que el proceso de reconstrucción, si el equipo opta por quebrar continuidad y reventar el plantel, requiere de ocho a 10 temporadas. Nash no puede esperar, pero el status quo en el desierto tampoco le atrae.

En nuestra nota acompañante, presentaremos las razones por las que Nash podría optar por buscar nuevos horizontes.

Algunas personas piensan que Nash usa la agencia libre como pistola a la sien de una franquicia que en los últimos años no ha invertido en talento al nivel necesario para aspirar a un campeonato. "Quiero que el equipo mejore, y respeto el hecho que los Suns declararon que esta temporada que acaba de concluir es un año de transición y que esperan que llegue el verano septentrional para poder lograr ciertas cosas. Tienen la oportunidad de lograr cosas positivas, lo que consideraré intensamente", sentencia Nash. En nuestra próxima nota de dos partes, presentamos los argumentos a favor que Steve Nash cambie de domicilio.