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No fue una sorpresa

Aunque la victoria lo sorprendió a él, que Webb Simpson haya ganado el U.S. Open no sorprende.

Luego de una extraordinaria temporada en el 2011 cuando Simpson logró sus primeras dos victorias en el PGA Tour, y luego sumó una gran actuación en la Presidents Cup, el flamante campeón del U.S. Open llegó al Olympic Club con dudas, luego de haber fallado el corte en los dos últimos torneos que jugó.

[+] AgrandarWebb SimpsonDavid Cannon/Getty Images

Simpson festejó con su mujer, Dowd, quien embarazada de 7 meses y medio lo acompañó durante todo el recorrido en Olympic.

Quizás por ese motivo, y por un 2012 mediocre, hasta el domingo, Simpson no recibió la atención de la prensa, ni siquiera después del 68 del sábado que lo ponía tres sobre par, a cuatro golpes de Furyk y McDowell que eran los líderes con uno bajo par.

"Haber salido más temprano el domingo fue una ventaja", dijo Simpson. "Sí, pensé que podía ganar, pero no salí pensando en el título, algo que hubiera sucedido si salía en el grupo final".

Luego de pasar los seis primeros hoyos en dos sobre par, su caddie le sugirió que dejara de mirar el tablero y siguiera jugando, cada tiro, cada putt, haciendo lo mejor posible... sin pensar en el resultado final.

Simpson cambió su enfoque e hizo birdies en los hoyos 6, 7 y 8. Y agregó el último del día en el 10.

"Honestamente no volví a fijarme como iba, pero me daba cuenta por los aplausos y el apoyo del público que la cosa iba bien. Los últimos hoyos fueron difíciles de jugar, estaba tan nervioso que varias veces debí golpearme las piernas porque ya no las sentía".

Nervios o no, Simpson hizo lo que muchos no pudieron hacer: terminar par, par, par. Luego de firmar su segunda ronda consecutiva de 68 golpes se fue a esperar a que llegaran los demás.

Sentado frente al televisor junto a su esposa Simpson vio pasar un pretendiente tras otro hasta que ya no quedaba nadie más por jugar.

Ahora, la edición 112 del U.S. Open ya es historia. La próxima vez que la USGA traiga el U.S. Open a San Francisco, la prensa podrá seguir contando lo enigmática que es esta cancha del Olympic Club, donde ninguno de los cinco ganadores previos: Jack Fleck, Billy Casper, Scott Simpson, Lee Janzen y Webb Simpson salieron del último grupo, y que, la última vez que jugaron aquí el score ganador fue de uno sobre par.