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A falta de chispa buena es la pegada

Al Real Madrid le falta respuesta física para sostener su juego EFE

MADRID -- Al Real Madrid le falta chispa. A diferencia del año pasado los jugadores no están en su mejor nivel físico en estos inicios de temporada. Ni mucho menos. Si hace 365 días se vieron a los madridistas como motos ahora no pasa eso. Lógico, teniendo en cuenta que la mayoría aún les quedan varias semanas más para alcanzar su pico más alto de forma. Echando un vistazo a la alineación de la Supercopa sólo Callejón lleva desde el inicio de pretemporada. El resto se ha incorporado mucho más tarde debido a la Eurocopa. Total que no hay que alarmarse porque a algunos futbolistas se les note lentos, las piernas aún las tengan pesadas y haya fatiga. Es lo normal.

Otra cosa es el desarrollo de los acontecimientos. Por ejemplo la primera parte de este Supercopa se vio un Madrid menor. La baja de Pepe se notó en el sentido de que el equipo se echó atrás. La misión exclusiva fue defender y eso un equipo como el Real no lo puede hacer. Lo mismo pensó Mourinho, que en el descanso dio órdenes de que había que cambiar la imagen. Así fue. El equipo salió con otra actitud. Sin fútbol –como casi siempre- pero sí con ese gen competitivo que le hace tan especial. Precisamente ese carácter ganador fue lo que le hizo llevarse un resultado positivo. El 3-2 final puede considerarse muy bueno en función a lo visto. Con nada, hacer dos goles es buena renta. La pegada está vez –no como contra el Valencia- resultó sí acompañó.

El problema del Real Madrid continúa siendo el mismo: no tiene fútbol. Con Khedira al lado de Xabi Alonso es imposible. El alemán no tiene capacidad de creación, pero sí el trabajo y capacidad para la recuperación. El balón le quema en los pies y así todo queda reducido a alguna diagonal de Xabi Alonso, la estrategia, la velocidad de Di María, que Özil saque su calidad –fuera de casa casi nunca lo hace- o que los de arriba hagan de las suyas.

Mourinho sabe que el equipo necesita más fútbol. Necesita un generador y por eso piensa en Modric, si bien el croata donde más ha destacado siempre es jugando por detrás de los delanteros. En ese sitio es muy bueno, pero ya está Özil ahí. En cambio, cuando Luka ha jugado de mediocentro apenas brilla. Entonces ¿para qué gastar 30 o 35 millones de euros en Modric? Esa cantidad resulta espeluznante cuando se trata de un jugador que no va a ser indiscutible. Un Cazorla era lo que le hacía falta a este equipo. Este caso de Modric es similar al de Coentrao. Los 30 millones son para tirarse de los pelos. La afición sigue preguntándose cómo se pudo pagar tanto por este jugador. Tampoco entiende que Marcelo no sea el titular cuando llegan este tipo de partidos. Son las cosas de Mourinho...