Juega contra el tiempo, arriesga demasiado y lo hace porque el boxeo sólo piensa en su parte económica. Juan Manuel Márquez ha decidido junto con Bob Arum que no tendrán, al menos de forma directa, la quinta cita con Manny Pacqauiao. Nos han privado de todo un "Clásico del Boxeo" por buscar que el negocio siga floreciendo e imponiéndose. Es una lástima. Márquez cumplirá 40 años en el verano y no puede ni debe tomar el riesgo de "darse" más tiempo. Era el momento de culminar la obra con Pacquiao.
LOS ANGELES, CA.-- Él es, en definitiva, quien se va a llevar los golpes y el que obviamente va a cobrar los millones de dólares, pero a mí no me gustó la decisión que tomó Juan Manuel Márquez. Me parece una decisión que puede jugar contra sus propios intereses y lo que es más importante aún, contra los intereses de un espectáculo deportivo llamado boxeo.
Septiembre 14, Las Vegas, Timothy Bradley. El campeón welter del Consejo Mundial de Boxeo, quien viene de ofrecer una interesante demostración ante el ruso Ruslan Provodonikov, es el rival que entre Márquez y Bob Arum han escogido para su reparación tras el espeluznante nocaut de diciembre ante Manny Pacquiao. La pregunta es: ¿Por qué no una quinta pelea de manera inmediata? ¿Por qué una nueva cita entre dos boxeadores que han sacado sus mejores condiciones en cuatro peleas anteriores? ¿Por qué no una nueva oportunidad para medir si el filipino, uno de los más grandes boxeadores en la historia del boxeo, está realmente acabado después de la terrible golpiza que Márquez le propinó a finales del 2012? ¿Por qué no, si la saga Pacquiao-Márquez ha sido mejor en cada una de sus presentaciones? ¿Por qué no, si Pacquiao ha sacado las mejores virtudes de Marquez y si Márquez ha logrado sacar los peores defectos de Pacquiao? La quinta cita era o es inevitable.
Márquez llegará al combate ante Bradley con casi 10 meses de ausencia de los cuadrilateros y habiendo cumplido en el verano 40 años de edad, lo cual, nos conduce, obligatoriamente a una nueva pregunta: ¿Cuántas peleas buenas le quedan a Juan Manuel? Por más que sea un atleta que se conserva, que se cuida, que trabaja, que estudia, que es un profesional al cien por ciento, el tiempo, el "dios-tiempo" termina estableciendo condiciones en una profesión de tanta exigencia como lo es el boxeo.
Bradley es el campeón welter del CMB, un boxeador cuyo gran triunfo, aquella controvertida decisión ante Pacquiao a mediados del 2012 le valió para "vegetar" en la banca durante ocho meses porque los ejecutivos de la televisión habían dicho que su estilo no era el apropiado para las grandes funciones. Bradley regresó en marzo al ring para en una pelea que dominaba con su estilo ante el ruso Provodnikov y que luego tuvo que cambiar, abrirse, jugar al "fajador" que no es y que no le queda, para ganar cierta notoriedad ante los ejecutivos de Top Rank. Ese atrevimiento de los últimos rounds en el Home Depot Center de Carson le valió para que otros contendientes abrieran los ojos.
Me parece que Bob Arum ha planteado un "mini torneo" en la división para sacar mayores dividendos económicos. Al fin y al cabo, esto es un negocio y los promotores solo pueden verlo desde ese ángulo. La idea es que Márquez se enfrente a Bradyley y Pacquiao a Provodnikov. Los ganadores, que Arum espera sean el mexicano y el filipino, se enfrentarán en otra gran y millonaria pelea.
La quinta cita entre Márquez y Pacquiao hubiesen marcado el final de un "Clásico del Boxeo", pero a veces olvidamos que el único "Clásico del Boxeo" válido es el dinero, el negocio, la industria.