MÉXICO -- Hablar de lucha libre siempre es polémico, pues para unos es hablar de un deporte apasionante, para otros es un deporte espectáculo, unos más lo catalogan como una farsa, un circo, un simple espectáculo con un "script" ya definido en donde las rivalidades parecen simples historias, pero para Gabriel Guerra es pasión, un deporte y sobre todo, una manera de crear arte.
Gabriel Guerra, joven artista plástico mexicano, nos abrió las puertas de su casa para explicarnos cómo su afición por la lucha libre se conjuntó con su habilidad artística para crear pequeñas esculturas que incluso han dado la vuelta al mundo.
"Recuerdo que desde pequeño mi mamá nos juntaba a mis hermanos y a mí para ayudarle a hacer manualidades, y desde ahí creció mi inquietud por prepararme. Estuve en Bellas Artes y actualmente trato de tomar cursos de pintura y escultura para estar al día en lo que realizo", señaló.
Conforme ayudaba a su mamá con adornos de plastilina y otras artesanías, de pequeño Gabriel se divertía con las funciones de lucha libre, especialmente cuando veía a su ídolo, Blue Panther. "Desde niño me apasiona la lucha libre, recuerdo que de pequeño me emocionaba ver al 'Maestro Lagunero' y actualmente disfruto ver al Dr. Wagner. Para mí este deporte es todo y aunque respeto a los que dicen que esto es un show, los invito a que se suban a un cuadrilátero para que lo comprueben".
"A mí me gusta lo que es la lucha clásica, Solar, los Villanos, el Negro Navarro, Blue Demon, incluso me atraen más esas máscaras, que son muy sencillas, pero son muy elegantes y llamativas", sostuvo.
Del mismo modo, resalta que en la actualidad la lucha libre, en especial las máscaras, se han convertido en un símbolo que identifica a México en todo el mundo, especialmente en eventos deportivos. "Se ha visto que en eventos masivos como los Mundiales de futbol además de sombreros de charro los mexicanos portan máscaras de distintos tipos, por lo que es común ver en los estadios las tapas del Santo, Místico, Blue Demon, entre otras".
Un aspecto característico en la obra de Gabriel Guerra es los cráneos o calaveras, que tomó como sello por la tradición mexicana del día de muertos, donde el culto a la muerte se toma como símbolo de respeto, por lo que cráneos enmascarados son el común denominador en sus piezas. "La muerte es algo significativo de México, al ver un cráneo colorido inmediatamente relacionas el día de muertos, que para mí es una fecha de culto y respeto por grandes personas".
Así, con la habilidad manual y la afición por el pancracio, Gabriel hizo de sus dos pasiones un hobby que tiempo después, con paciencia y esfuerzo, e incluso portando una máscara en los lugares donde se presenta, ha forjado un modo de vida, una parte esencial en su entorno, un vehículo que "virtualmente" lo ha llevado a varias partes del mundo. "Mis obras han sido apreciadas en nuestro país por gente que viene del extranjero, incluso brasileños, españoles y alemanes han comprado mis piezas y me han invitado a exponer mi obra en sus países, lamentablemente no he tenido el apoyo correspondiente de las autoridades mexicanas para poder realizar este sueño, que espero se pueda realizar pronto".
Si están interesados en ver más de la obra de Gabriel Guerra los invito a buscarlo en Facebook, donde tiene varias fotografías de sus creaciones, que no sólo se basan en luchadores, pues también realiza alebrijes, figuras tradicionales de la cultura mexicana e incluso personajes de televisión e historietas que reproduce mediante el arte de la cartonería.