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Martes 13: el día en que el más "hermoso" se volvió el más "horrible"

¡Oribe Peralta llega al América! Y el problema es que Chivas se había formado "en la fila" de manera anticipada buscando la oportunidad de hacerse del futbolista. Las versiones corren e indican que fue el propio futbolista quien escogió como su destino Coapa, mientras que en Verde Valle se quedaron con los brazos cruzados sin demasiadas excusas ni pretextos que ofrecer. La realidad es tajante e inobjetable: el América le ganó la partida a las Chivas.

LOS ÁNGELES, CA.- Resultó ser un martes 13 para Chivas y un martes de gloria para el América.

Juan Manuel Herrero, el presidente deportivo del Guadalajara, no sabía cómo "despejar la pelota" que había caído a sus pies: "No sé qué paso. Estábamos negociando con él. La verdad es que en Chivas no buscamos un futbolista de renombre. ¿Sabes cuál ha sido la producción del jugador en los últimos meses?".

La realidad es tajante e irremediable: El América le ganó la partida a las Chivas o para decirlo con mayor calidad -como se utilizaría en el argot popular mexicano-: el América "se la partió" otra vez a las Chivas.

Fue el mismo Jorge Vergara quien hace algunas semanas, mientras repasaba la lista de posibles refuerzos para el urgido Guadalajara, recalcaba que habían estado encima de la posibilidad de contratar a Peralta. "Si se trata de dinero, ese no es problema", dijo el propietario de las Chivas. Algunas versiones periodísticas indican que la operación que el América y Santos cerraron oscilaría los 11 millones de dólares, todo un record para una transacción en la historia del futbol mexicano.

Al mismo tiempo en que el América se aprestaba para anunciar a su "contratación bomba" del próximo verano, las Chivas se quedaba cruzadas de manos y sin la posibilidad de conseguir en el mercado un futbolista con la estadísticas, los hechos y los argumentos futbolísticos para ofrecer las respuestas que tiene Peralta. Algunas fuentes en Torreón indican que fue el propio Oribe el que pidió su salida del Santos y que el propio Oribe fue el que subió el pulgar por el América y lo bajó por las Chivas.

Peralta llega al América, un club de alta responsabilidad y de gran pasión donde ya otros han tenido sus problemas para aclimatarse y para sostener un nivel de producción en la cancha. Pero a diferencia del Guadalajara, tendrá un equipo más completo que puede jugar para él y donde él pueda apostar con resultados fehacientes. El América es una apuesta por los primeros lugares y Chivas era, en su momento, una apuesta por el sufrimiento y la lucha por la salvación.

Pero hay formas distintas de verlo. Quizá por un poco de diferencia en el tema económico, Oribe desperdició la oportunidad de ponerse el "traje de superhéroe salvador" que necesita Chivas y la historia de Chivas y llegó a un equipo donde tendrá que pelear contra la leyenda de los americanistas hechos en el Club América. Oribe escogió un club que lo necesita pero que podía vivir sin él, por otro que suspiraba por tenerlo y que basaba gran parte de su éxito o de su fracaso en su persona. Es una cuestión enfoques.

Sea como sea, el América ha resuelto sus necesidades primarias: las de mantenerse en el foco de atención del mundo futbolístico mexicano. Ha hecho la gran contratación incluso a un mes de la Copa del Mundo y "de postre" le ha quitado un posible refuerzo a su odiado enemigo deportivo.

El martes 13, el día en que "el hermoso" se volvió "el horrible" y Chivas sufrió sin ni siquiera saltar a la cancha.


@Faitelson_ESPN