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Maracaná y el guión que puede cambiar

Messi se podría consagrar en Brasil AP

RÍO DE JANEIRO, Brasil -- Hace casi tres décadas que levantaron por ultima vez un Copa del Mundo. Este domingo, tendrán la oportunidad de volver al sitio que históricamente les corresponde en el futbol. Para hacerlo, Alemania no modificará el estilo y la convicción del juego que los trajo hasta aquí y para lograrlo, Argentina promete ser el mismo equipo ordenado y disciplinado en lo defensivo. Ese parece ser el "guion" de la "Gran Obra" del Teatro Maracaná, a menos de que aparezca uno de los actores principales y decida cambiar el orden y la situación de las escenas.

La "gran obra" del Teatro Maracaná parece tener un "script" perfectamente establecido: Alemania, al ataque. Argentina, a la defensa, pero puede mucho más que eso. Cuando el balón comience a rodar, los actores entraran en escena y alguno de ellos, que no será ni Mascherano ni Schweinsteiger pueden cambiar el orden y la situación de las escenas para brindarnos un espectáculo completo. ¿Sera así?

"Brasil, decimé qué se siente…Tener en casa a tu papa..."

Lo que parecía ser imposible, ocurrió. Copacabana se transformo en un "carnaval" argentino. Cientos, miles de aficionados, con boletos o sin él para la final, caminando por sus calles, entonando canticos, lanzando miradas amenazadoras y presumiendo las banderas albicelestes. Los argentinos tomaron Rio aun sin la garantía de ganar nada.

Llegó, finalmente, llegó el 13 de julio y Argentina puede ser campeón del mundo en tierra brasileña. Pero para ello tendrá que encarar, descifrar y soportar a uno de los equipos más completos del mundo.

Alemania entra como favorito a la escena del Maracaná y por una simple y sencilla razón: ha jugado mejor que nadie en este Mundial y parece tener a los futbolistas, al entrenador, la táctica, el estilo, la experiencia y el carácter necesario para apoderarse de la Copa del Mundo. Todo ello no significa que los alemanes sean invencibles. Argentina ha mostrado como argumento principal uno de los grandes secretos de todo el deporte profesional: la defensa. Un equipo que se para con orden, que tiene disciplina, que corre, que lucha y que cuenta con el mejor futbolista del mundo en caso de que haya que "apretar" un botón de emergencia.

Nadie espera a una Argentina diferente a lo que mostro en las rondas de octavos, cuartos y semifinales. Y nadie tampoco espera que Alemania trate de transformar su estilo y su convicción de ir por el partido.

Los dos entrenadores tiraron el sábado sus "cartas de presentación" para la partida. El alemán Low dijo: "No queremos que esto se defina en los penaltis" y el argentino Sabella remató: "Estamos listos para hacer lo que tengamos que hacer con tal de ser campeones del mundo".

Alemania y Argentina parecen tener bien definidos sus papeles en la "gran puesta" que presenta hoy el "Teatro del Maracaná". Los alamanes van por el balón, por el control del juego y por la portería contraria. Los argentinos van a esperar, van a luchar por el mediocampo y van a tratar de lanzar algún latigazo para los peligrosos hombres que tienen al frente, entre ellos uno "'llamado" Lionel Messi. Si la final del Mundial respeta ese "guión", podríamos encontrar la manera de que fuese un juego atractivo y dramático. La espectacularidad solo podría llegar, del lado argentino, de la inspiración y capacidad de su numero "10".

Llegó el 13 de julio a Maracaná. El futbol busca un nuevo campeón del mundo. Alemania ha esperado 24 largos años para ello y Argentina 28. Los dos están urgidos y necesitados de "beber" de la Copa de los consagrados del futbol. ¿Quién lo hará? Esa es la pregunta que solo el crespúsculo y quizá la noche en el barrio de San Cristovao terminara por resolver.


@Faitelson_ESPN