El mejor futbolista estadounidense de la historia ha anunciado su retiro para el final de la temporada. Un jugador completo, que jugó tres mundiales, que alineó en Alemania, en Inglaterra y en la MLS, un personaje que entendió su valor tanto dentro como fuera de la cancha y el generador de un "Clásico", de una batalla memorable entre dos naciones que antes de su aparición no parecían disfrutar de su rivalidad futbolística. Landon Donovan dice adiós... El futbol mexicano, a pesar de todo, lo va a extrañar.
LOS ANGELES, CA.- Una de sus frases memorables podría resumir lo que su carrera terminó pregonando y significando para el futbol de toda una región: "Para mí, el aprender otra lengua no era una cuestión de gustos. Si no aprendía español, no me pasaban la pelota".
Landon Donovan anunció este jueves que sus minutos como futbolista profesional se están agotando. Dirá adiós al deporte profesional al término de la campaña 2014 de la MLS y el futbol lo recordará, ya desde hoy, como el referente más poderoso en la historia del juego en los Estados Unidos.
Pero más allá de las cualidades que lo llevaron a jugar tres mundiales -que debieron ser cuatro- y de su afortunada incursión en la Liga Premier inglesa y en la Bundesliga alemana, permanecerá también la capacidad intelectual que tuvo para acrecentar el nivel del futbol en los Estados Unidos y darle un contexto diferente al duelo ante México. Donovan no solo fue un competidor completo cuando se trataba de jugar el llamado "Clásico" de la Concacaf, también entendió qué tipo de protagonismo y de actitudes necesitaba dentro y fuera de la cancha para fortalecer más el duelo deportivo. Donovan comprendió la desventaja pasional que significa el futbol en su propio país ante el vecino del sur. Y calentó los duelos desde su personalidad y desde su gran capacidad en el campo de juego.
Sus memorables batallas en las eliminatorias mundialistas, en el Mundial del 2002, en eventos preolímpicos y hasta en partidos amistosos surtieron efecto para que Estados Unidos emergiera como el pilar que es hoy para el área futbolística. Donovan le dio personalidad y clase a un futbol que amenazaba con tomar la calle y del destino de su herencia en la frialdad europea sin contar con los argumentos técnicos para competir. Donovan entendió que el futbol estadounidense podía y debía crecer a partir de lo que lograba arrancarle a México.
Es difícil entender lo que sucedió en la parte final de su carrera. Hoy, él dice que le "falta hambre" para poder continuar a sus 32 años, situación que podría de alguna u otra manera justificar la decisión que el entrenador de la selección de los Estados Unidos, Jurgen Klinsmann, tomo de relegarlo de la Copa del Mundo. Donovan hubiera podido jugar su cuarto Mundial en Brasil y estoy seguro que el resultado de la selección norteamericana no habría sido distinto.
Habrá que disfrutar los últimos momentos de un excepcional futbolista, que entendió su cuál debía ser su papel, en la cancha y fuera de ella. El generador de una pasión, de un "Clásico", de una rivalidad promete perdurar por mucho tiempo y por qué no, casi, casi "El Anti-cristo" del futbol mexicano.
@Faitelson_ESPN