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La peor Serie Mundial de la historia

Creo que alguien tiene que decirlo: Esta no es exactamente la batalla entre los Yankees de 1927 contra la Gran Maquinaria Roja de 1975.

Los Reales de Kansas City ganaron 89 partidos en la temporada regular y los Gigantes de San Francisco ganaron 88, la cuarta combinación de victorias más baja en la historia de la Serie Mundial, solo detrás de las series de 1981, 1918 y 1973. Pero el 1981 fue una temporada acortada por una huelga y la de 1918 se vio recortada por la Primera Guerra Mundial. Eso solo deja el choque de 1973 entre los Atléticos con 94 victorias y los Mets con 82 triunfos con el menor total combinado de victorias. Por lo menos ese choque tuvo dos equipos que ganaron sus respectivas divisiones. Ni los Reales ni los Gigantes ganaron su división, lo que convierte esta Serie Mundial en la segunda de la historia entre equipos comodines y la primera entre dos equipos con menos de 90 victorias (los Angelinos y los Gigantes chocaron en el 2002 pero esos fueron equipos con 99 y 95 victorias).

Incluso se puede argumentar que los Reales y los Gigantes llegaron a los playoffs simplemente gracias a la geogría. Los Reales ganaron apenas dos juegos más que los Marineros, quienes tuvieron que jugaron en una división más dura con los Angelinos y los Atléticos. Los Gigantes tuvieron el quinto mejor record en la Liga Nacional y tuvieron que jugar en una división con los dos peores equipos en el béisbol. ¿Hubiesen ganado 88 juegos si estuviesen en la Central de la Liga Nacional? Los Gigantes tuvieron el calendario más fácil en las mayores.

Así que estos no son grandes equipos. Así que se puede decir que esta es la peor Serie Mundial de la historia, por lo menos en cuanto a calidad de los equipos. Los fanáticos de los Gigantes probablemente no estén de acuerdo con esto, pero si este fuese un gran equipo, ¿por qué los Gigantes cayeron en el torbellino de la clasificación mediante el puesto de comodín? ¿Por qué no pudieron vencer a los Dodgers para conquistar el banderín divisional? Los fanáticos de los Reales pueden decir que su equipo ha ganado ocho juegos de postemporada de forma seguida, pero si los Reales fuesen un gran equipo, ¿por qué cayeron en el torbellino de la clasificación mediante el puesto de comodín? ¿Por qué no pudieron ganar dos juegos más y vencer a los Tigres para conquistar el banderín divisional?

En la temporada regular, los Reales llegaron en el noveno puesto en la Liga Americana en carreras anotadas y cuarto en carreras permitidas. Los Gigantes fueron quintos en carreras anotadas y sextos en carreras permitidas. Hay una razón por la que ninguno de ellos ganó 90 juegos.
Ahora, dicho esto: Esta debería ser una Serie Mundial divertida entre dos equipos bastante parecidos y que tienen razones intrigantes por las cuales deben ser apoyados. Los Reales, que han sido por tanto tiempo los desventurados Reales, son un grupo de jugadores jóvenes agradables, demonios de la velocidad y genios a la defensiva con ese increíble bullpen que infunde miedo a los fanáticos y equipos contrarios. Uno siente que si no los puedes vencer en las primeras seis entradas no vas a poder ganarles. Todo el mundo comienza desde cero en la postemporada y los Reales han jugado el béisbol más emocionante que hayamos visto en años al tener marca de 8-0 en los playoffs. Ellos superaron un deficit de 7-3 para vencer a los Atléticos en el juego de comodines y luego vencieron a los Angelinos con 98 victorias y a los Orioles con 96 triunfos. Ellos se merecen el estar aquí.

Los Gigantes, esperando dejar su marca en la historia con su tercer título de Serie Mundial en cinco años, son un grupo agradable de veteranos que hemos llegado a apreciar en octubres recientes, desde el adorable Panda Pablo Sandoval al estóico receptor Buster Posey al alegre y desenfadado Hunter Pence. Uno siente que si el juego está cerrado ellos encontrarán la manera de vencerte, ya sea por un error del contrario o porque el manager Bruce Bochy haga la movida correcta en el momento correcto; después de todo, ellos tienen una increíble marca de 30-11 en la postemporada desde 2010. Ellos vencieron a los Piratas en la carretera en el juego de comodines y entonces vencieron a los Nacionales con 96 victorias y a los Cardenales con 90 triunfos. Ellos se merecen estar aquí.

En un año en el que claramente hemos carecido de un equipo dominante, quizás no sea sorpresa que hayamos terminado con la más improbable de las Series Mundiales. Hay dos formas de ver esto. Como dijo Morris de Pittsburgh en mi charla el viernes:

"Wow, una increíble postemporada hasta ahora. ¿Pero acaso yo soy el único que realmente no quiere ver una Serie Mundial entre un quinto sembrado versus un cuarto sembrado? Me doy cuenta que cualquier cosa puede pasar en una serie corta... pero no quiero que pase cualquier cosa".

O como me escribió Perry desde Monterey:

"Así que, si quieren encontrar al "mejor equipo" , ¿por qué el béisbol no hace como la Liga Premier y ponen a cada equipo jugar contra el resto de los equipos la misma cantidad de veces, y que el equipo con el mejor record sea declarado el campeón? Cada equipo podría jugar contra los otros 29 equipos seis veces, 3 en casa, 3 en la carretera, y luego de 174 veces, tendríamos un campeón. ¿No vimos a los Gigantes llorando por esto luego de tener el mejor record en MLB en el 2000 y 2003 y perder ante el comodín en la Serie Divisional de la Liga Nacional? ¿O a los fanáticos de los Cardenales quejándose luego de haber ganado la Serie con 83 victorias o como comodín?"

Sin importar lo que opinen ustedes sobre el formato de la postemporada de Grandes Ligas, todos estamos de acuerdo en esto: Esperamos que sea una gran Serie Mundial. Será difícil igualar la emoción de las primeras dos rondas que estuvieron llenas de drama en entradas extras, juegos decididos por una carrera (estamos en ritmo para tener el mayor porcentaje de juegos decididos por una carrera en una postemporada) y juegos decididos por un cuadrangular para dejar tendido al rival. Es el choque de unos Reales que "acaban de aprender a ganar" versus los Gigantes que "saben cómo ganar desde el 2010".

Solo denme seis o siete juegos con más atrapadas acrobáticas de Lorenzo Cain y cuadrangulares de Travis Ishikawa y bases robadas de los Reales y sliders de Madison Bumgarner y rectas de Yordano Ventura y hits oportunos de Buster Posey. Denme eso y me olvidaré de que ninguno de estos dos equipos llegó a las 90 victorias.