BRISTOL -- Luego de un primer día pasado por agua, este martes salió el astro rey a irradiar todo su brillo y a calentar motores para lo que será el resto del Abierto Australiano. No estoy hablando del sol, si no de Roger Federer quien busca su 16to título de Grand Slam.
La verdad es que le tocó un rival nada fácil, ya que Igor Andreev se las había ingeniado para darle batalla a Roger, primero en Gstaad en la final del 2004 (que fue a 4 sets) y en el 2008 en el US Open, allí lo llevó a 5 reñidos capítulos. Así que Federer sabía que su primera ronda iba a ser una prueba de fuego.
El estilo particular del ruso se ve que incomoda a la perfección suiza, el pique de la pelota es similar al pique de los tiros de Rafa, que como todos sabemos molestan mucho a Federer, quizás por tener la escuela del tenis español donde Igor se desarrollo como jugador. Su derecha es muy potente pero con mucho efecto de "top spin" que hace que la pelota pique alto y un revés que es otra derecha, ya que Andreev se corre constantemente para evitarlo para generar los cambios de ritmo.
El partido fue dinámico, entretenido y hasta por momentos pareció que fue dominado por el ruso, pero Federer fue controlándolo paulatinamente. El momento decisivo del partido apareció en el 5-6 del tercer set con Andreev break arriba y punto para el set. Federer se equivoca ejecutando un drop shot que ejecutó para acortar un punto que tenia perdido, y el tiro salio muy alto y largo, lo que dejaba al ruso en perfecta posición para liquidar el tanto y poner la pizarra 2-1 en sets a su favor.
Pero los dioses del tenis aparecieron en la ayuda de Federer y lo que parecía un fácil tiro ganador por parte del ruso, se convirtió en el peor error de Andreev, tirando la pelota larga ante el asombro del mundo entero, lo que le significó el principio del fin al camarada.
El set fue a un tiebreak que se llevó fácil Federer y luego lo demás fue historia. Andreev no pudo sacarse de la cabeza el error cometido y esto se reflejo en el marcador del cuarto set 6-0.
Lo que parecía otra sorpresa, como la dio la novia del ruso, Maria Kirilenko, el día anterior frente a Maria Sharapova, se convirtió en un alivio para quienes apuestan a que Federer se lleve otra corona en Australia, y demuestra a las claras que los jugadores tienen toda la razón al decir que el partido mas difícil en un torneo es, siempre, el de primera ronda sin que importe el rival que tengas al frente.
Federer sobrevivió y se perfila a buscar una revancha, cuando se proyecta un eventual encuentro en la segunda semana frente a otro ruso, Nicolás Davidenko quien viene de vencerlo a él en semifinal y a Nadal en la final en Doha, a principio de temporada. Y que bien pudiera evitar que la historia del tenis se continúe escribiendo, ya que Davydenko esta a las puertas de ganar su primer título de Grand Slam.