Había mucha expectativa entre los exploradores por la primera salida en el entrenamiento primaveral de Greg Holland con el uniforme de los Rockies de Colorado, y había mucho misterio. Holland había lanzado para los exploradores en noviembre, ya que se acercaba al final de su verano de rehabilitación de la cirugía de Tommy John, y en la opinión de muchos que estuvieron allí, no se veía bien. Su velocidad con la bola rápida estaba muy por debajo a la que tenía en sus días con los Reales de Kansas City, incluso, con algunos equipos marcándole en la mitad de las 80 mph.

Como tal, hubo cierta sorpresa cuando los Rockies lo firmaron antes de que recibiera a otro ejército de exploradores, y el contrato cargado de incentivos tenía más poder adquisitivo de lo esperado por algunos ejecutivos rivales. En la mente de algunos en la industria, Colorado había apostado fuertemente en un lanzador, mucho más de lo que otros habrían hecho basados en ese entrenamiento.

Pero Holland se veía bien en esa primera sesión de entrenamiento de primavera, y durante el primer 40 por ciento de la temporada 2017 ha lanzado excepcionalmente -tan bueno que parece tener un pie en el equipo All-Star de la Liga Nacional y podría ser considerado como la mejor firma de la categoría de agentes libres de invierno.

Holland ha permitido sólo un jonrón de 10 hits en 23 2/3 entradas, y tiene 23 de 23 en oportunidades de salvamento, el tipo de rendimiento que los evaluadores de los Rockies sólo habían soñado debido a la tibia historia del staff de pitcheo.

"Al final del día, era un riesgo calculado", indicó el gerente general de Rockies, Jeff Bridich, en una conversación telefónica el sábado. "Un riesgo calculado que necesitábamos tomar".

El agente de Holland, Scott Boras, asumió que las mejores ofertas para su cliente se desarrollarían después de que los tres grandes cerradores agentes libres salieran del tablero: Mark Melancon, Aroldis Chapman y Kenley Jansen. Una vez que los tres grandes firmaron, los Nacionales de Washington y los Rockies fueron los equipos con la mayor necesidad de un cerrador. Los propietarios de Washington no estaban listos para comprometer el tipo de dinero discutido por Boras.

Los Rockies, por otra parte, estaban totalmente enfocados en conocer al Holland como persona. Steve Foster, el entrenador de lanzadores de los Rockies, conoció a Holland desde cuando ambos estaban en la organización de los Reales y avaló tanto el carácter del lanzador como su competitividad. Holland emergió como cerrador en un bullpen que incluía al talentoso Wade Davis y a Kelvin Herrera, dice mucho sobre él, pensó Bridich. Los Rockies estaban conscientes de que Holland incluso trató de lanzar a través de un ligamento del codo desgarrado en 2015, cuando Kansas City trabajó para volver a la Serie Mundial.

Los Rockies también tenían un arma de evaluación única en el entrenador de bullpen Darren Holmes, quien, como Holland, vivía en Asheville, Carolina del Norte. La personalidad de Holmes a la hora de pitchear durante su carrera fue muy similar a la de Holland: no perder tiempo, enfoque en el juego y atacar a los bateadores. Además, Holmes podría relacionarse con los retos particulares de lanzar en Coors Field. Holmes y Holland hablaron y se textearon y su comunicación sirvió como otra capa de entendimiento sobre Holland.

"Es un jugador de béisbol regular, trabajador de Asheville, Carolina del Norte", dijo Bridich. "Yo sé que él tiene la confianza de todo el mundo. Este es un hombre que está empeñado en volver a donde estaba antes de que se lesionó".

Los Rockies vieron a Holland en una sesión de tiradas largas en enero, avistamiento que les confirmó que estaba sano. Boras y Bridich negociaron un acuerdo inusual que proporcionó a los Rockies cierta protección en el caso de que se lastimara, pero también le dio a Holland la oportunidad de ser bien pagado. Él obtuvo $ 6 millones en salario base y $ 1 millón garantizado en una posible compra de su acuerdo de 2018, pero si Holland acumuló 30 juegos terminados o lanzó en 50 juegos, el contrato de 2018 se convertiría en una opción de jugador de 2017 por $ 15 millones.

Holland ya tiene 25 juegos terminados, y su opción de jugador para 2018 debería concretarse a finales de mes. El 21 de mayo, recogió un extra de $ 1 millón por su 20mo juego terminado. Hay un máximo de 8 millones de dólares para el bono de rendimiento este año, que podría construir de dos maneras. Obtiene $ 500,000 cada uno por 30, 35, 40, 45, 50 y 55 apariciones de pitcheo. Para los juegos terminados, obtiene $ 1 millón cada uno por 20 y 30 y $ 2 millones cada uno por 40, 50 y 60.

Es posible que él gane $ 35 millones en su contrato de dos años con los Rockies, y con Colorado en primer lugar y Holland sirviendo de "sombra" - para usar la palabra de Boras- sobre el resto de los lanzadores jóvenes; el equipo ocupa el décimo lugar en efectividad.