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Millonarios cayó derrotado 3-2 a manos de Bolívar en La Paz en un juego en el que el equipo Embajador estuvo cerca del empate, pero finalmente tuvo que irse con las manos vacías en su segunda presentación por el Grupo E de la CONMEBOL Libertadores. Leonardo Castro fue quien ilusionó a los colombianos con un doblete, pero los errores defensivos de su dupla de centrales en el primer tiempo costaron la derrota. Millonarios se vio superado en todo el primer tiempo, el pánico escénico por afrontar los 3.650 metros de altitud de La Paz y un afán desordenado por ir al frente costaron en la primera mitad, más si a esto se le suman los constantes errores defensivos que fueron cruciales para que el local se llevara el triunfo. Juan Pablo Vargas y Alex Moreno Paz estuvieron directamente involucrados en los goles del contrario. Corrían apenas tres minutos de iniciado, vino un tiro de esquina que los bolivianos cobraron en corto, el primer error fue de Leonardo Castro, quien dejó pasar la pelota en primera instancia y luego Juan Pablo Vargas hizo exactamente lo mismo para que tranquilamente José Sagredo llegara solo para definir en otro horror defensivo, pues Daniel Giraldo soltó la marca y el jugador de Bolívar definió solo ante el arco de Montero. Luego apenas al minuto 10’ vino el gol de Francisco Da Costa, una jugada que aprovechó bien el atacante del equipo boliviano tras otro error del mundialista Juan Pablo Vargas, el defensor y quien lució hoy la cinta de capitán en Millonarios hizo una mala entrega en la mitad y vino el brasileño para definir con categoría ante Montero. Pero aún faltaban más errores defensivos de Millonarios, esta vez fue Alex Moreno Paz el antagonista. El jugador de 22 años dejó que libremente Bruno Savio pusiera el tercero para el local de cabeza, algo insólito, apenas lo siguió y lo soltó en el área, inaudito, pues desde unos minutos antes Bolívar se encontraba con un jugador menos en el campo tras la expulsión de Yomar Rocha. La jugada del que era el 3-0 parcial vino otra vez luego de un tiro de esquina que los bolivianos cobraron en corto y tras el centro de Fernando Saucedo.
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