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Encontrar un precedente acerca de esta cuestión es una tarea muy difícil. Porque las Copas del Mundo están destinadas a ser el escenario donde los mejores se reúnen durante un mes para ir en busca del máximo premio. Sin embargo, el fútbol siempre tiene sus excepciones. En Qatar 2022 no estará uno de los tres jugadores más destacados de la actualidad. Y la razón de su ausencia no tiene que ver con cuestiones físicas sino con motivos futbolísticos. Erling Haaland no se clasificó con la Selección de Noruega, así de simple. El delantero de Manchester City es uno de las estrellas del momento. No hay demasiado discusión sobre eso. En los 92 años de historia mundialista, casi siempre los futbolistas más destacados estuvieron presentes en la Copa. Quizás, la situación más parecida sea la de Kevin Keegan. En 1978, el inglés era el mejor de Europa y conducía a un Hamburgo ganador en la Bundesliga. A fin de año se quedó con el Balón de Oro, pero su Selección no logró el pasaje a Argentina 1978. Con solo 22 años, Haaland ya consiguió ser una pieza clave en dos de los equipos más importantes del continente europeo: Borussia Dortmund y Manchester City. Sin embargo, el protagonismo de sus clubes todavía no coincide con el rendimiento en su seleccionado. Cuando se disputó Rusia 2018, el Androide todavía no había llegado a Dortmund, el club en el que estalló a nivel mundial por sus goles y sus datos arrolladores. Tampoco había debutado aún en la Selección. Su imagen comenzó a recorrer el mundo un año después, cuando le marcó ¡nueve! goles en el 12-0 de su seleccionado sobre Honduras por el Mundial Sub 20 disputado en Polonia. Dejó FC Salzburgo con 29 goles en 27 partidos, cuando el cuadro alemán tomó nota del rendimiento del atacante noruego en aquel momento de 19 años y lo fichó por 20 millones de euros, a la vista de otros grandes del continente. El 29 de diciembre de 2019 selló su vínculo con el equipo alemán y, tan solo algunos días después (el 18 de enero de 2020), marcó su primer triplete en su debut en apenas ¡23 minutos! Los números del delantero noruego en el aspecto individual no coinciden con las chances del combinado nórdico en lo colectivo. En su sexto partido internacional marcó su primer triplete y lleva 21 goles en 23 partidos con un promedio de 0.91 de tanto por encuentro disputado. El atacante del City deberá ver el Mundial por televisión porque Noruega no pudo competir con Países Bajos y Turquía, que lo dejaron tercero del Grupo G de las Eliminatorias. Su equipo sumó 18 unidades, producto de cinco triunfos, tres empates y dos derrotas, que no fueron suficientes para escalar sobre sus principales contrincantes de la zona que además compartió con Montenegro, Letonia y Gibraltar.  La Euro 2020 tampoco es un consuelo para Haaland, ya que tampoco logró la clasificación. La UEFA Nations League pareciera otorgar un buen síntoma de cara al 2026, a causa de que el equipo nacional del atacante citizen finalizó segundo (10 puntos de 18 posibles) en el Grupo B4 que compartió con Serbia, Eslovenia y Suecia. Dos años y medio después de su estallido futbolístico, el delantero noruego ya acumula 20 goles en 14 partidos desde su estreno en el Manchester City. Su suceso en la Premier League fue impresionante. Incluso, ha motivado una insólita manifestación de hinchas para juntar firmas con el objetivo de "vetar" su participación en el torneo. Más allá de su gran presente a nivel clubes y de que va en camino a ser uno de los goleadores más prolifícos de todos los tiempos, ya vivió su primera frustración con el seleccionado y su futuro es una incógnita por la falta de competitividad que ha mostrado Noruega en las últimas décadas. Ryan Giggs podría ser una referencia histórica para que Haaland tenga en cuenta. El galés fue uno de los grandes jugadores de las últimas décadas pero jamás estuvo en una Copa del Mundo por la debilidad de la Selección de Gales en sus días de estrella. Llegar al máximo torneo es un objetivo colectivo, más allá del talento y el genio individual. Los noruegos Alexander Sorloth y Martin Odegaard son y serán los principales socios del delantero del City en esa búsqueda mundialista. Solo resta saber si ese potencial alcanzará para impulsar a Noruega hacia una Copa del Mundo. Aún faltan cuatro años para el Mundial de Estados Unidos, México y Canadá y el nacido en 2000 todavía ni siquiera tendrá 25 en junio de 2026, por lo que la edad no será un impedimento para él, que en ese lapso sumará más goles a su cuenta personal. La historia mundialista de Noruega es bastante pobre. En 1938 llegó a los octavos de final, en 1994 se volvió en primera ronda y en 1998 repitió lo conseguido en los 30', pero ya van 24 años sin estar en el torneo grande. Erling Haaland podría ser la clave para reescribir ese pasado gris. Su potencia goleadora, un buen plantel que lo rodea y que 16 selecciones más tendrán lugar en el 2026 deberían ser suficiente para que los noruegos vuelvan a la Copa del Mundo. Dificilmente, Haaland se conforme con eso.
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