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No hay Copa del Mundo sin la elección de una sede, sin estadios, sin un sorteo de los grupos, sin álbum de figuritas y, sobre todo, sin nuevas camisetas para las selecciones. Hay rituales, pasos a seguir, que deben cumplirse para que llegue el momento que todos esperamos. Y Qatar 2022 no es la excepción. En Rusia 2018, Adidas tuvo la mayor delegación (12 selecciones) y las ventas más altas (según Bloomberg, más de 8 millones de dólares) pero la que se destacó fue Nike (10 selecciones) que monopolizó la final con Francia y Croacia. Cuatro años más tarde, la marca norteamericana llega con más representantes a Qatar. Nike tendrá 13 camisetas en acción, Adidas solo 7 y Puma 6. Quién venderá más y quiénes serán los finalistas, bueno, eso está por verse. Lo que está claro que es que las nuevas camisetas nacionales no llegan solas. Hay muchas historias detrás de las flamantes indumentarias que se utilizarán en el primer mundial en Medio Oriente. Repasemos las más interesantes. DINAMARCA HUELE QUE ALGO ESTÁ MAL
Hummel, la marca que viste a la selección danesa, siempre da que hablar. Habitualmente es por sus diseños, elegantes y retro, pero esta vez hay algo más. La compañía danesa presentó las vestimentas monocromo del equipo nacional y las transformó en un símbolo de protesta contra el Mundial en Qatar. “Con las camisetas de Dinamarca queremos enviar un mensaje dual. No solo son un homenaje a los campeones de la Euro 1992 sino también una protesta contra Qatar y sus violaciones a los derechos humanos”, comienza el posteo con que Hummel hizo pública la indumentaria titular. “Por eso es que atenuamos el tono en todos los detalles, incluido nuestro logo. No queremos ser visibles durante un torneo que le costó la vida a miles de personas. Apoyamos a la selección danesa hasta el final, pero eso no es lo mismo que apoyar a Qatar como país anfitrión. Creemos que el deporte debe unir a la gente. Y cuando no lo hace, queremos hacer una declaración”, concluye. Dinamarca es una de las pocas selecciones que llevará al Mundial tres equipaciones. La titular, todo en rojo. La alternativa, todo en blanco. La tercera, todo en negro. “Es el color del luto. El color perfecto para la tercera camiseta de Dinamarca para el Mundial de este año. (...) Es una declaración sobre el historial de derechos humanos de Qatar y el trato que da a los trabajadores inmigrantes que han construido los estadios”, afirma Hummel. La respuesta qatarí no se hizo esperar. Los organizadores de la Copa del Mundo mostraron su enojo con la marca danesa y la acusaron de trivializar su esfuerzo para darle seguridad a los trabajadores que levantaron la infraestructura que hará posible el Mundial. "Discrepamos con la afirmación de Hummel de que este torneo ha costado la vida a miles de personas. Rechazamos de todo corazón la trivialización (de) nuestro genuino compromiso de proteger la salud y la seguridad de los 30.000 trabajadores que construyeron los estadios de la Copa Mundial de la FIFA y otros proyectos del torneo", asegura el Comité Supremo. Medios occidentales, como The Guardian en 2021, afirman que más de 6500 obreros murieron durante la construcción de la infraestructura mundialista. FIFA y Qatar han negado sistemáticamente esas cifras mientras el país se compromete con mejoras en las condiciones laborales. Luego de años de reclamos contra la decisión de realizar el Mundial en Qatar, la protesta de la marca danesa es el gesto más fuerte emitido hasta ahora por cualquiera de las selecciones participantes. Mientras ONGs como Human Rights Watch continúan presionando a FIFA y a los patrocinadores del Mundial para que los trabajadores sean indemnizados, Hummel dio el paso al frente como la primera marca que se opone abiertamente a jugar la Copa del Mundo allí. Y deja un potente mensaje que Dinamarca va a vestir, al menos, durante tres partidos. EL FIASCO ALTERNATIVO
La marca alemana Puma nos viene acostumbrando a dos cosas: a asumir riesgos con sus diseños, algo muy valorable, y a estandarizar camisetas, algo bastante discutido. Para Qatar 2022 hizo ambas cosas y el resultado no dejó a nadie contento. Esa lógica de hacer camisetas genéricas, un mismo diseño con diferentes colores, que ya viene aplicando a nivel clubes, de Manchester City en Inglaterra a Independiente en Argentina, dio el salto a las Selecciones para este Mundial y confirmó el fiasco. Si bien es cierto que las versiones nacionales no son tan genéricas, los detalles que las distinguen son menores y casi no consiguen adeptos. Uno de los países donde más rechazos cosecharon las nuevas camisetas fue en Ghana. La población del país africano se volcó a las redes sociales para ventilar su descontento con la nueva ropa de las Estrellas Negras. Algunos fans pidieron que la Federación demande al fabricante y otros reclaman nuevos diseños para llevar a Qatar. Los diseños de Puma también generaron críticas dentro de la industria. El diseñador deportivo, Todd Radom, cuestiona el enfoque estructurado de la propuesta para un evento como este. "La Copa del Mundo es todo fervor y pasión, y cada país participante merece un aspecto individual que abarque y refleje su cultura", afirma. Lejos de identificar a las naciones que las usan, estas camisetas impersonales dan la sensación de que la compañía se quedó sin ideas o sin tiempo para producir nuevas vestimentas. Uno de los casos más claros, entre las 6 selecciones que irán a Qatar, es el de Suiza. El diseño central de su alternativa recuerda a los calendarios de los teléfonos móviles. "Tengo entendido que los suizos son conocidos por su capacidad para medir el tiempo y por su habilidad para fabricar relojes, pero...", plantea Radom con humor. Quizás fue en Uruguay donde el rechazo popular a la nueva ropa nacional llegó más lejos. Aquí también las redes sociales fueron el lugar donde los hinchas de la celeste pudieron expresar su descontento. “La camiseta alternativa nueva de Uruguay es más fea que tener que madrugar un lunes para venir a trabajar”, afirmó un internauta. “Perdonen pero es un mamarracho, un diseño que asusta”, escribió otro. Los reclamos fueron tantos y tan fuertes que el presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), Ignacio Alonso, debió salir a defender el diseño, al que calificó de “diferente”. "La camiseta blanca ha generado una polémica interesante en redes. Hubo mucha crítica, algunas negativas, otras favorables. Fundamentalmente las favorables han venido de gente más joven. El diseño es una inspiración en el running, nos trasladó la empresa. Hay que verla puesta. Hay que verla jugar y a partir de allí vamos a valorarla en su justa medida", explicó. UN GALLO CONTRA LOS LEONES
Faltan semanas para que arranque la Copa del Mundo y Camerún todavía no tiene camiseta. La Federación que conduce Samuel Eto’o rompió el contrato que tenía con la marca francesa Le Coq Sportif meses antes del inicio del torneo y su nuevo proveedor, One All Sports, corre contra reloj para presentar el uniforme que Los Leones Indomables vestirán en Qatar. Dicen que las camisetas ya están en Yaundé pero nadie pudo verlas todavía. La ropa de Camerún, siempre vinculada con algún escándalo como cuando usaron un diseño sin mangas que la FIFA vetó o como cuando vistieron un enterizo, ahora está envuelta en un conflicto judicial. Por decisión de Eto’o, la FECAFOOT rescindió el contrato con Le Coq Sportif debido al impago de sus derechos económicos en los plazos previstos. La empresa francesa decidió llevar a juicio a la Federación para resolver el conflicto. El titular de la compañía, Marc-Henri Beausire, afirmó que demanda a Camerún por "incumplimiento abusivo de contrato" y busca mantener vigente el contrato que los unía hasta el último día de 2023. Además, amenazó a otras empresas con represalias en caso de comprometerse con la FECAFOOT. Quizás por esa amenaza, la Selección de Camerún firmó contrato con One All Sports, una marca de ropa deportiva, con una historia muy opaca, ajena al mundo del fútbol. Se trata de una empresa con dueño australiano, pasado en EEUU, sede en UK con un solo empleado declarado y radicada en Bangkok, Tailandia, un destino habitual para los evasores de impuestos. One se promociona con su cercanía al automovilismo (viste a Jaguar) pero tiene poco vínculo con la pelota (acaba de sumar a Raja Casablanca a su escudería). Mientras la situación se define en Tribunales, a la espera de que la Justicia dictamine una cifra para saldar el desacuerdo, Camerún jugó sus últimos amistosos con la ropa de Le Coq Sportif. Por su parte, One All Sports ya presentó algunas prendas de entrenamiento y mantiene el misterio sobre cómo serán las camisetas con las Los Leones Indomables debutarán ante Suiza, el 24 de noviembre. EL OLVIDO CANADIENSE
Quizás la mayor injusticia de este Mundial es que Canadá no tendrá una nueva camiseta con la que recordar su regreso a la Copa del Mundo tras 36 años. La explicación oficial es que están en un ciclo de diseño de camisetas diferente al resto de las selecciones que irán a Qatar vestidas por Nike. La realidad es que nadie, ni la Federación ni la marca de la pipa, creía en ellos. Los más locuaces a la hora de expresar su descontento por tener que seguir usando la camiseta con la que clasificaron al Mundial son los propios jugadores de Canadá. El delantero Jonathan David, por caso, festejó un gol en el amistoso de septiembre ante Qatar cubriendo el logo de Nike en señal de protesta. El secretario general de la Federación canadiense, Earl Cochrane, le dijo a The Athletic que el proceso para crear una camiseta para un Mundial es largo, el medio habla de 18 meses. Para llegar a Qatar deberían haber comenzado en marzo de 2021, cuando la hoja de maple no tenía su lugar garantizado. Por entonces, solo los jugadores y su DT, John Herdman, confiaban en que clasificar para Qatar era posible. "Todos los equipos deberían tener una nueva equipación para el Mundial, porque es un acontecimiento simbólico. No lo odio, pero me hubiera gustado tener una nueva equipación. Creo que eso demuestra que nadie creyó realmente en nosotros”, afirmó el defensor Sam Adekugbe. El descontento canadiense, por no tener nueva camiseta Nike, se replicó en otras naciones donde sí hubo renovación pero el flamante diseño no fue bien recibido. En EEUU, la nueva camiseta titular, una versión blanca bastante genérica con el logo de la Federación centrado en el pecho, molestó a hinchas y a futbolistas. “Estamos tan enojados como todos ustedes!!!”, escribió el delantero Tim Weah, hijo del histórico George Weah. “Intenté decírselo”, agregó el volante Weston McKennie. La falta de un diseño propio, como las rayas rojas y blancas, que consolide la identidad del fútbol de los Estados Unidos, es lo que más molesta a sus fanáticos. Un centenar llevó su indignación a la plataforma change.org para juntar firmas y reclamar otra versión de la camiseta titular. Quizás, el que mejor expresó ese descontentó fue Alexis Lalas, un prócer del equipo nacional. "Cuando se trata de los uniformes de Estados Unidos tenemos una apariencia incorporada. Somos rojos, blancos y azules. Somos estrellas y rayas. Creo que deberíamos apoyarnos en eso”, afirmó. Las cosas tampoco fueron sencillas para Nike en Inglaterra. Primero por que la muerte de la Reina obligó a postergar la presentación. Luego, porque la camiseta titular blanca, ahora acompañada por mucho azul, no fue del agrado del fanático inglés. Las redes, otra vez, fueron el ágora de la protesta. "Chocante, nunca he sido fan de que Inglaterra use el azul, nuestra equipación debería usar sólo el rojo y el blanco", afirmó un hincha en Twitter. "Cuando Kane levante el trofeo más vale que sea con la equipación roja y no con esa otra monstruosidad", escribió otro. También hubo problemas en Portugal. Los hinchas no quedaron conformes con el cambio de paradigma que propuso Nike para su camiseta nacional, quizás la última que vista Cristiano Ronaldo. El nuevo diseño diagonal, que integra el verde de los pantalones, fue considerado en la web como “un pijama barato”. La idea de fluidez, de evocación a la insignia nacional, que propuso la marca y replicó la Federación bajo el lema “llevar la bandera”, se quedó en eso. Una bonita pieza de marketing que chocó de frente con el gusto popular. De todos modos, lo tenemos claro, cuando empiecen los partidos cada hincha olvidará sus nociones estéticas y concentrará todas sus fuerzas en apoyar a su Selección. No importa cuán fea pueda parecer una camiseta, será la más linda de todas si, en Qatar, logra levantar la Copa del Mundo.
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