América sufre más de la cuenta para empatar con Impact en la ida

MÉXICO (ESPN.com.mx/Iván Cañada) -- El salvador americanista llegó cuando más lo necesitaban los suyos. Oribe Peralta despertó a un América dormido y levantó a un Azteca aturdido para darle esperanzas a unas Águilas que sufrieron de más contra el Impact en la Final de Ida de la Liga de Campeones de CONCACAF. Oribe apareció y Matosas respiró. Al final un empate a uno y todo por decidirse en Montreal.

América no se encontró un Herediano en el Azteca como ocurrió hace unas semanas. Las Águilas se enfrentaron a un Impact mucho más preparado, experimentado y concentrado. Los de Montreal sabían bien lo que querían y lo que necesitaban para obtener eso que deseaban. Tenían sus ideas bien claras y lo reflejaron a lo largo del partido.

Seguro en defensa, fuerte en el centro del campo con un indomable Nigel Reo-Coker, y astuto en la delantera con Ignacio Piatti y Dominic Oduro, el conjunto canadiense se acomodó en el Azteca, jugó con inteligencia, siempre muy paciente y ordenado. Tenía bien hecho su plan y lo siguió paso a paso.

América, por la contra, intentó como más pudo, con algunos de sus hombres fuera de forma y lejos de su ritmo y otros como Rubens Sambueza y Oribe Peralta siempre entregados, con una lucha sin límite, pero con pocas respuestas para lograr embates efectivos y goles a favor.

El conjunto azulcrema se ha convertido en un equipo gitano. Así como un día puede ser arrollador y eficaz, al otro puede ser goleado y lucir por sus constantes confusiones en defensa y su poca efectividad adelante. Hoy, fue justo esa segunda faceta en el momento menos adecuado, con un título de por medio.

Si Rubens y Oribe eran los más conectados, otros como Darwin Quintero, Michael Arroyo, Darío Benedetto y hasta Osvaldo Martínez volvieron a mostrar que están lejos de su nivel más alto o simplemente fuera de forma. En el caso de Martínez, incluso, debió salir expulsado en el ocaso del primer tiempo al derribar a Oduro cuando era el último hombre, pero la tibieza del árbitro causó que se fuera con una tarjeta amarilla. Matosas no arriesgó y lo sacó de inmediato para darle toda la segunda parte al 'Cepillo'.

Antes de eso, el Impact se adelantó en el marcador, gracias a un genial Ignacio Piatti, quien en uno de sus tantos intentos por desequilibrar, se encontró con un balón que definió ante Moisés y lo dejó sin opciones. Logro consumado para un Montreal que no se encerró en su cancha y apostó por un empate a cero. También buscó goles y dio con ellos.

La mayor presión americanista llegó en el segundo tiempo en el que también aprovechó un poco el cansancio habitual de un equipo extranjero, al que poco a poco le pasaba factura la altura de la Ciudad de México. El problema de las Águilas, no obstante, pasó por las continuas malas decisiones de Benedetto, Arroyo y Darwin, que nunca dieron con sus objetivos.

Tampoco lo consiguió Rubens Sambueza, quien estrelló un balón en el travesaño tras un disparo de larga distancia de tres dedos que dejó cimbrando el arco rival. Rubens no se lo pensó y por poco consumó una jugada genial, de otro partido. Para su mala fortuna, quedó en un mero grito ahogado de gol.

Los arribos fueron constantes de los de Coapa, pero Benedetto siempre que las tuvo, las falló. Situación contrastante a lo vivido ante el Herediano. El argentino no salió en su noche y el Azteca se lo recriminó cuando salió del campo al ser sustituido por Martín Zúñiga. El América se desesperó con el paso del tiempo y las respuestas llegaron, gracias al salvador Peralta. Ahora, toda la apuesta es revertir lo vivido en el Clásico ante Chivas y en la vuelta de la Final de la Concachampions en Montreal.