Roma venció en la nieve de Bérgamo

ROMA (ESPNdeportes.com) - En el estadio Atleti Azzurri d'Italia, bajo la potente nevada que puso en blanco la ciudad de Bérgamo, Roma le ganó de visitante a Atalanta por 3 a 2.

El local anotó ambas veces con Marko Livaja, quien primero puso en ventaja a su equipo y luego empató el marcador, tras la remontada momentánea de la visita firmada por el brasilero Marquinho y de Miralem Pjanic. Pero al final, Vasilis Torosidis le dio el triunfo a los giallorossi.

Un resultado justo, porque a pesar de las difíciles condiciones de la cancha, que claramente privilegiaban el conjunto menos técnico, la Loba supo argumentar la victoria con un buen juego y unas cuantas ocasiones de gol.

Paradójicamente, más allá del frío, al inicio la cancha estaba bien porque no nevaba pero los capitalinos sufrieron lo mismo, porque no bajaron con mucha intensidad y se dejaron apretar por un rival que, en cambio, empezó con grande ritmo y velocidad.

Así, al octavo minuto Carmona presionó alto y recuperó sobre la trescuartos un despeje corto de un rival, poniéndolo a Bonaventura en condición de entrar al área algo por izquierda y encararlo a Stekelenburg: el "diez" falló de manera pésima la definición, pero sin embargo su remate pifiado se transformó en un perfecto pase de gol para Livaja, quien solo y con el arco libre tuvo apenas que empujarla adentro.

Roma reaccionó inmediatamente y cuatro minutos más tarde igualó, gracias a una buena jugada personal de Marquinho, quien recuperó el esférico en posición de "ocho", encaró hacia adelante, se acomodó sobre la zurda enganchando para el medio prácticamente desde la línea del límite del área sacudió un gran disparo con comba que se metió a lado del poste a la derecha del inculpable Consigli.

El 1 a 1 emparejó el marcador, pero sobre todo el trámite, porque los dos cuadros pasaron a una fase de estudio, frenados también por la nieve que en ese momento estaba bajando con todo e iba transformando el césped en barro. Un equilibrio que duró hasta el 34º, cuando Pjanic tuvo un tiro libre a un paso nomás desde la media luna y lo ejecutó con un remate fuerte y preciso, que por encima el pobre Consigli no pudo ni siquiera ver bien por culpa de la nieva. En efecto, el juego retomó tras el 2 a 1 con el clásico balón "de nieve", que es de color rojo.

Pero la Loba no pudo irse a los vestuarios con la ventaja, porque al último segundo Livaja metió el empate entrando desde la izquierda y conectando un gran centro de Carmona, con una volea de zurda con la que estampó el esférico en la parte interna del palo a su derecha. Vale la pena subrayar que, en la ocasión, el delantero cometió una clara falta sobre Torosidis.

En el complemento, por suerte, tras el buen trabajo para limpiar un poco la cancha, la nieve paró de caer y así el partido se puso algo más entretenido. Los giallorossi empezaron a jugar bastante bien y crearon algunas ocasiones interesantes, para lograr pasar en ventaja al minuto 26 cuando Torosidis, entrando por derecha, cabeceó muy bien "a la Van Basten" y, quizás fallando la que debía ser una torre, la clavó con un globito hacia el palo más lejano.

La Loba controló bien la parte final del encuentro, si bien arriesgó mucho con un córner en el que Lucchini cabeceó muy fuerte y Stekelenburg tuvo que "pasarse" para sacarla nuevamente al tiro de esquina.

Sobre el final, Roma pudo golear, creando muchas chances, y por encima se quedó con hombre de más por una situación realmente muy rara en la que no se entendió exactamente lo que pasó, puesto que Contini se llevó la segunda amarilla por una falta en el área a Perrotta pero sin que el referí cobrara penal en la ocasión.

De todas maneras, la Loba no logró aumentar la ventaja, culpa sobre todo de Lamela, quien falló un par de mano a mano en los que podía y debía hacer algo más.

La figura de ESPNdeportes.com: Miralem Pjanic (8)