Bale comanda al Real Madrid en el triunfo sobre Elche

MADRID (Paola Núñez, corresponsal) -- A falta de Cristiano, Gareth Bale. Real Madrid venció por 3-0 al Elche en el partido que inauguró la jornada 25 de Liga esta tarde en el Santiago Bernabéu. Con goles de Asier Illarramendi, en su estreno goleador como merengue en Liga, el extremo galés e Isco, el conjunto merengue llegó a las 63 unidades en la tabla para poner presión al Barcelona y Atlético de Madrid.

Cristiano Ronaldo, que cumplía su tercer partido de sanción después de que el Comité de Disciplina Deportiva desestimara la apelación del Real Madrid, dejó su lugar a Jesé, quien esta vez careció de magia y por primera vez en cinco encuentros se fue en blanco.

Y es que al Madrid le costó más de la cuenta abrir el marcador, si buen su primera acción de peligro llegó al minuto 2. En una internada de Ángel Di María por la izquierda, el argentino cedió el balón a Karim Benzema, que falló en el disparo. Era la primera de varias oportunidades de cara a gol para el francés, que no logró ver puerta por más que lo intentó. En cambio, Asier Illarramendi, que ni lo buscaba, encontró el gol. El mediocampista vasco anotó al minuto 33 su primer tanto en Liga con la camiseta del Real Madrid.

La acción no estuvo exenta de polémica, pues Benzema estaba adelantado en el cobro de esquina que dio lugar a que de rebote el balón encontrara los pies de Illarra, cuyo disparo batiera a Manu Herrera, tras un ligero desvío de la defensa.

Aunque no permitieron más que un par de acercamientos al elche, Eeal Madrid no había encontrado el espacio para hacer daño, y cuando lo hacía, le fallaba la puntería. Los de Fran Escribá, aunque defendían por momentos con línea de cinco cuando el pivote Rivera retrasaba su posición, presionaban bien a la salida del conjunto local, que tuvo que invertir fuerza física para meter a los alicantinos en su mitad de la cancha.

Pero poco a poco Real Madrid ajustó el juego a su conveniencia. Bale, moviéndose al interior, había dejado la banda derecha libre para Carvajal. En la izquierda, Árbeloa, que reemplazaba a un Marcelo que no acaba de ponerse a punto, hacía lo propio mientras Di María funcionaba como una especie de interior y Jesé subía a acompañar a Benzema.

Asentado en el campo, Madrid comenzó a funcionar. Benzema y Jesé tuvieron al menos dos intentos cada uno, incluido un cabezazo de Benzema que increíblemente se fue sobre la portería, antes de que Illarramendi lograra abrir el cerrojo del Elche. También Bale, que fue frenado en un par de ocasiones por los cuatro defensas alicantinos.

Para la segunda parte, Elche salió con más energía en busca de la igualada, provocando que los merengues sacaran a relucir su lado más agresivo. Pasados cinco minutos, el central Pepe, que lucía el gafete de capitán a falta de Ramos y Marcelo, se llevó una amarilla al derribar a un contrario con un rodillazo.

Costaba quitarle el balón al Elche, que no lograba avanzar más allá de tres cuartos de cancha, pero con Rivera al mando para poner orden en la media, incomodaban cada vez más a los locales. Ancelotti comenzaba a desesperarse; sus hombres, también, sobre todo después de que pasado el minuto 60, Pepe lograra internarse cediendo el balón a la banda para que Bale lo volara en el disparo. El galés, sabedor de lo que se había perdido, buscó resarcirse por todos los medios hasta que lo logró con una genialidad marca propia. El '11' merengue marcó el 2-0 pasados los 25' de la segunda parte con un disparo con potencia a más de 40 metros que dio en el interior del travesaño antes de rebotar dentro de la portería y ante el que Manu Herrera no tuvo nada que hacer.

Faltando 15 minutos para el final del encuentro, Jesé, que poco había lucido, dejó su lugar a Isco. Con el cambio Ancelotti, que no gusta del trabajo del malagueño en la media, mandó un cambio de sistema, con el '23' acompañando a Benzema en punta. Cinco minutos después, el movimiento dio frutos pues en una internada en el área sacó un disparo para fusilar a Herrera. Con el 3-0 en el marcador y la victoria prácticamente asegurada, Ancelotti se relajó, dando entrada a Morata y Casemiro, para darles unos minutos de rodaje. Elche, que había perdido las esperanzas desde hacía ya rato, se dedicó el resto del tiempo a contener al Madrid y poco más.