Alemania aniquiló a Portugal con hat-trick de Thomas Müller

SALVADOR, Brasil (ESPNDeportes.com) -- La centenaria Alemania arrasó en su debut. El cuadro germano, haciendo gala de su tradicional maquinaria perfecta para aplastar a Portugal, que vivió una auténtica pesadilla.

Todo lo que pudo salir mal para Portugal, salió. Dos cambios obligados por lesión, una expulsión en la primera parte y un Cristiano Ronaldo que no fue ni su sombra. Pero esta vez no fue la rodilla del '7' lo que impidió que acaparara los reflectores, sino la abrumadora eficiencia alemana, que con tres goles de Thomas Müller y uno de Mats Hummels festejó su partido número 100 en la Copa del Mundo con una goleada por 4-0.

Alemania tardó 11 minutos en sacar frutos de su aplastante superioridad de la media hacia arriba cuando Joao Pereira cometió una falta dentro del área sobre Mario Götze con un jalón mientras forcejeaba con el alemán por el balón. El árbitro decretó la pena máxima pese a las quejas del cuadro luso y Müller no falló desde los 11 pasos.

Alemania, que jugaba con cuatro centrales en la zaga, había renunciado al contraataque. Pero no hizo falta. Con Ronaldo anulado desde los primeros compases, Sami Khedira, Philipp Lahm y Toni Kroos hicieron lo que quisieron para dar juego a sus compañeros.

Portugal intentaba reaccionar pero una y otra vez se veían en la necesidad de replegarse. Al minuto 27 llegó la segunda tragedia de la tarde para los lusos, cuando perdieron al atacante Hugo Almeida por lesión y tuvo que entrar en su lugar Eder. Cuatro minutos después, Alemania duplicó su ventaja. Un pase filtrado de Mesut Özil acabó en un tiro de Göetze que Rui Patricio sacó como pudo a tiro de esquina. En esa jugada, Alemania terminó de matar las esperanzas lusas. El cobro de Kroos, medido con precisión, se tradujo en gol cuando el central Hummels aprovechó la distracción de los centrales portugueses para ganarle en el salto a Pepe y anotar el segundo tanto de los germanos.

El golpe mortal hundió a Portugal, que hacía más de media hora que no llevaba peligro al área contraria. Portugal ya sufría de más cuando, cinco minutos después Pepe se llevó la tarjeta roja. Müeller había exagerado una falta y el explosivo central luso recriminó la acción con un cabezazo cuando el alemán todavía estaba en el suelo. El árbitro no le perdonó la acción y dejó a Portugal, de por sí endeble en defensa, con uno menos.

Alemania, que no pierde sus formas, aprovechó. Una tras otra vez buscaron el tercero hasta que en tiempo de compensación Müller se encontró con un regalo de la zaga para mandar a los lusos al vestuario con una desventaja de 3-0. En una jugada iniciada por el capitán Philipp Lahm, esta tarde en los controles en la media, culminó con un pase de Kroos al centro del área que Bruno Alves falla en despejar para que Müeller, a un costado, la prendiera para anotar su segundo gol de la tarde.

Con la superioridad numérica en la segunda parte, Alemania administró bien sus fuerzas y se lo tomó con calma. Ya había advertido Joachim Löw, técnico germano, que no se jugaría sus opciones en la velocidad por las bandas. En su lugar, Alemania apostó por la genialidad de sus hombres en la media. Sin prisa y con suavidad y una superioridad técnica abrumadora mantenía todo bajo control. Cada pase, cada cambio de juego, se hacía medido a precisión y con un ritmo pausado que los rivales no supieron romper.

Y por si Portugal no tenía problemas suficientes, perdió a Fabio Coentrao por una alarmante lesión. Hasta ese momento el lateral era el único jugador que intentaba llegar, por la banda, a la portería de Neuer. Al 63', el defensa había emprendido la carrera por izquierda cuando se desplomó en el campo después de sentir un tirón en la pierna derecha.

A 20 minutos del final, Alemania también tuvo su dosis de infortunio, cuando el central Mats Hummels se hizo daño en el tobillo derecho y tuvo que dejar su lugar a Mustafi. Si la 'Mannschaft' había reducido el ritmo para la segunda parte, en la recta final se abocó a manejar el resultado. Pero aún con el hambre saciada, Müller decidió que había lugar para el postre y aprovechó un balón suelto en un terrible despeje de Rui Patricio para terminar de aplastar a Portugal a 10 minutos del final.

Cristiano, que hizo lo imposible por llegar a tiempo al Mundial, no pudo hacer nada para evitar la catástrofe. En la última jugada, el '7' intentó marcar el del honor en un cobro, pero había quedado claro que no era su noche y menos con Manuel Neuer, que voló para tapara el disparo, en frente.