LOS ÁNGELES -- Luego de desperdiciar una holgada ventaja al descanso, Los Ángeles Clippers se recuperaron para superar a los Chicago Bulls por 94-89 y extender su racha triunfal a siete juegos.

Con esta victoria, los angelinos barrieron la cierre ante los dirigidos por Tom Thibodeau y extendieron su gran comienzo a una marca histórica de 15-6.

La tropa de Vinny Del Negro fue comandada nuevamente por Blake Griffin, quien aportó 22 puntos y 10 rebotes.

Chicago encestó ocho de sus primeros 10 intentos desde el arco, algo que les permitió remontar una desventaja de nueve puntos al principio del tercer cuarto.

Sin embargo, el que es el peor equipo de la liga desde la línea de tres no fue capaz de mantener el ritmo. Su ofensiva se estancó y solo encestaron dos más hasta el final del partido.

Carlos Boozer, al igual que en el partido disputado en California, tuvo una gran noche pero sus 24 tantos y 13 rebotes no fueron suficientes.

Por el lado de los Clippers destacó su férrea defensa en el último cuarto, cuando los locales hicieron su último intento para llevarse un resultado positivo.

La banca volvió a ser fundamental, generando pérdidas y saliendo de contragolpe de manera muy efectiva.

Matt Barnes y Jamal Crawford se combinaron para sumar 24 de los 34 de la segunda unidad.

Lamar Odom también fue clave, recibiendo una falta ofensiva de Boozer en un momento crítico y mostrándose lúcido para hacer la jugada correcta en ataque.

Los Clippers se llevaron el triunfo a pesar de verse superados en los tableros (50-42) y de cometer 15 pérdidas.

A su favor estuvieron los 50 puntos obtenidos en la zona pintada y una muy interesante actuación defensiva, ya que fueron capaces de mantener a los Bulls en 40 por ciento desde el campo.