Phil JacksonMark J. Rebilas/US PresswireLos seguidores de los Lakers se quedaron esperando el regreso de Phil Jackson
Hay que darle crédito a los Lakers. Nunca se quedan sin formas de mantener al mundo en vilo. Un día después de darle a Mike Brown un voto público de confianza, lo mandan a hacer sus maletas. Y luego a preparar a todos para "El Padrino III" de Phil Jackson en Los Angeles ("Justo cuando pensaba que estaba fuera, me jalaron hacia adentro"), una llamada clama por Mike D'Antoni, el hombre presentado como una segunda opción lejana. Hay una razón para que esta franquicia haya florecido en Hollywood.

Teniendo en cuenta como los cantos de "Queremos a Phil" se han hecho eco a través de Staples Center en los últimos dos días, sé que esta decisión deja a muchos aficionados decepcionados. Cada uno de los períodos de Jackson en Los Angeles han propiciado múltiples campeonatos, y este es un equipo construido para transportar inmediatamente esa tradición. En teoría, ¿qué más se puede pedir?

Sin embargo, algo sobre la contratación de Jackson siempre me pareció demasiado familiar. Predecible. Un poco demasiado conveniente. Se podía oír como las ruedas giraban en las cabezas de los aficionados, los medios de comunicación y los jugadores. "Phil está disponible ... Vive en el sur de la bahía ... Once títulos ... Maestro Zen ... Por supuesto que es el hombre".

Excepto, por supuesto, que las situaciones más complejas no suelen resolverse con soluciones ya hechas, soluciones claras. Y yo no estaba totalmente convencido de que otra vuelta completa con Phil era la suficiente clavada que la mayoría de la gente pensaba.

Para empezar, la narración sin fisuras de retorno era exagerada. Sólo cinco jugadores actuales de los Lakers han jugado bajo Jackson, y tres tenían períodos relativamente cortos. A pesar de algunos momentos famosos, el tiempo de Metta World Peace en el sistema de PJ fue, por decir lo menos, turbulento. Steve Blake jugó un año bajo Jackson y estaba visiblemente incómodo con el triángulo. Durante la única campaña de Devin Ebanks con Phil, el entonces novato rara vez se quitó su ropa de calentamiento. Sólo Kobe Bryant y Pau Gasol realmente han florecido en el triángulo. Como apuntó Bryant luego de la victoria del viernes, la escuadra de 1999-2000 ganó el título en su primera temporada triangular, pero también estaba cargada con los veteranos que llevaban años jugando contra los Chicago Bulls de Jackson, lo cual creó un cierto grado de familiaridad. Esta lista del 2012-2013 no parece que se beneficiaría de ese lujo.

También estaba el problema de Steve Nash, quien sigue encajando extrañamente en el triángulo como lo hizo en el Princeton. O el armador del Salón de la Fama hubiera soportado otra curva de aprendizaje en un sistema que no responde a su estilo, o Jackson se habría visto obligado a modificar su ofensiva para dar cabida a un tipo de jugador que nunca había entrenado. Ambos enfoques podrían haber significado más choques de cabezas, y al menos una de las razones por las que Brown fue despedido fue para evitar tal escenario.

También vale la pena recordar que la última temporada de Jackson con los Lakers no terminó muy bien, más allá de la barrida de segunda ronda a manos de Dallas. Como escribí en ese entonces, la temporada 2010-2011 no fue buena para Jackson. Tuvo que ser engatusado para volver, luego, a lo largo de la temporada a menudo parecía estar desconectado con los jugadores, incapaz de llegar a ellos y motivarlos. El equipo parecía menos preparado de lo que debería haber estado en los momentos claves, y esa falta de equilibrio mostró su lado oscuro durante una carrera de playoffs que fue de tambaleante a desastrosa. Con demasiada frecuencia, Jackson confió demasiado en su enfoque establecido en vez de aventurarse fuera de su zona de confort para hacer frente a lo que claramente no estaba trabajando con el equipo. A decir verdad, parecía cansado de la rutina de la NBA, como un hombre que se dio cuenta de que podría haber cometido un error en regresar.

Que Jackson podría estar sintiendo la comezón por entrenar, no me sorprende. Como dice el refrán, lo lleva en la sangre. Pero me pregunto, ¿qué hubiera pasado una vez que se rascara la picazón, y se encontrara a sí mismo mirando hacia abajo a una gira de siete partidos. ¿Se sentiría aun energizado, o quemado?

Mientras tanto, Mike D'Antoni tiene una relación de larga data con Nash y un sistema muy adecuado no sólo para el armador, sino también para muchos de sus compañeros de equipo. Con Kobe, Gasol y Howard, tienes tres opciones potencialmente mortales a la par con Nash para un pick-and-roll. Esto puede no ser la lista ideal para un ritmo de "7 segundos o menos", pero eso no es necesariamente un problema. Desde mediados de la década del 2000, los equipos de los Phoenix Suns solían desmontar a los opositores en la media cancha, y cuando es el momento adecuado para correr, hay muchos Lakers que pueden responder a la campana. De cualquier manera, D'Antoni representa un antídoto a la lentitud que ha perjudicado a los Lakers en las últimas temporadas.

En cuanto al otro lado del balón, D'Antoni nunca será confundido con Tom Thibodeau, pero sus mejores equipos de los Suns (2005-2006 a 2007-2008) no fueron precisamente tamices para recordar por algunas personas. Eran mediocres en cuanto a clasificación defensiva se refiere, y eso fue sin el beneficio de una fuerza como Howard en el centro.

Y el lamento de "si el sistema de D'Antoni era tan bueno, ¿cómo es que nunca ganó un título?" tampoco suena verdadero para mí. El plantel del 2004-2005 perdió a Joe Johnson en los playoffs, y fue la primera temporada con Nash. En el 2005-2006, compitieron en la postemporada sin Amaré Stoudemire (su mejor jugador interior), Kurt Thomas (su mejor defensor interior) y, con el tiempo, a Raja Bell (su mejor amenaza de 3 puntos y podría decirse que su mejor defensa de ala). Tales ausencias los pondría al día con la mayoría de los equipos. En el 2006-2007, en su serie de segunda ronda ante los eventuales campeones, los Spurs vieron sangrar a Nash por la nariz descontroladamente durante un extraño Juego 1, seguido de suspensiones controversiales para Stoudemire y Boris Diaw para el Juego 5, que Phoenix perdió.

Los Suns tuvieron un poco de mala suerte legítima durante los mejores años de D'Antoni. Sí, todos los equipos lidian con algún grado de adversidad durante los playoffs, pero mi punto es, simplemente, que las quebraduras de los Suns fueron tan duras que una firme condena del sistema de D'Antoni se siente mal pensada. Nunca he comprado la idea de que esos equipos Suns fueron retenidos por la filosofía de su entrenador. Además, D'Antoni hace el baloncesto divertido, y los Lakers necesitan desesperadamente un descanso de un par de temporadas dignas de hambre.

Aunque sin duda hay otros nombres dignos de consideración (en particular, Nate McMillan), entre los dos candidatos más votados, yo también habría escogido a D'Antoni.

Evidentemente, Jackson no habría sido una "mala" contratación por cualquier período. Estamos hablando del entrenador más exitoso en la historia de la NBA, y mucho menos por esta franquicia. Es muy cercano a Kobe y Gasol, los dos co-capitanes de los Lakers y más condecorados jugadores condecorados de campeonato. Jackson se encuentra entre un selecto grupo de entrenadores de la NBA con credibilidad y seriedad, de esos que tienen el oído de todos. Conseguir que este desorganizado y hasta ahora desanimado grupo de jugadores esté todo en la misma página lo antes posible es una necesidad, y PJ generalmente vibra en este contexto. Entiendo por qué estaba a la cabeza o cerca de ella en la lista de los Lakers - por no hablar de la de Kobe.

D'Antoni, sin embargo, tiene más sentido.