LOS ÁNGELES -- El armador de Los Angeles Lakers, Steve Nash, regresó a la duela el sábado después de 24 partidos y casi dos meses alejado de las canchas por una fractura en su pierna izquierda. Los laguneros mejoraron considerablemente en ataque gracias a su juego, que contó con una actividad de 41 minutos. Luego de su primera aparición en las canchas tras la lesión, ¿cómo notó el equipo su presencia?

LIDERAZGO
Ya lo predijo 'Magic' Johnson hace unos días. "Nash traerá el liderazgo que le hace falta a los Lakers". Dicho y hecho. El base devolvió la confianza en la posición de creador del juego. Y esto no significa que esta constancia se hubiera perdido con la presencia de Chris Duhon o Darius Morris, sustitutos ambos de su compañero y del otro armador lesionado, Steve Blake, pero hacía falta ese punto que Nash aporta a la ofensiva. Su experiencia, buen criterio y compresión absoluta del juego (es capaz de ver jugadas que otros nunca imaginarían) ayudó a los laguneros a mejorar sus opciones ofensivas.

MÁS MOVILIDAD

La circulación cuenta con más soltura cuando Nash está en la cancha. Ayudado por la movilidad de sus compañeros, tanto las alas como los hombres grandes, las alternativas son mucho mayores. En este sentido, Metta World Peace, Kobe Bryant, Jodie Meeks y Jordan Hill estuvieron estupendos y ayudaron a que Nash contara con alternativas varias más allá de los pick and roll.

PICK AND ROLLS
Sin duda, fue el apartado que más salió beneficiado gracias a Nash. Tanto Dwight Howard como Pau Gasol lograron que su juego ganara enteros con respecto a otros encuentros (entiéndase en cuanto a lo que a alternativas se refiere). Bien es cierto que durante el partido ante Golden State Warriors, la pronta acumulación de faltas personales de Howard y Gasol impidió que, sobre todo el estadounidense, pudiera estar activo todo el tiempo que acostumbra. Cuando el núcleo fuerte del equipo estuvo sobre la duela, el sistema ofensivo de Mike D´Antoni comenzó a funcionar, algo que sucedió sobre todo en el último periodo, cuando Gasol, Metta, Bryant, Howard y Nash compusieron el quinteto lagunero durante más tiempo.

Los combos Nash-Howard y Nash-Gasol funcionaron a la perfección cuando el centro y el ala-pívot subían a hacer la pantalla a la línea de tres. Sus desmarques de vuelta a canasta acabaron en pases del armador a ambos. Eso obligó a los defensores a abandonar las posiciones abiertas donde se encontraban Bryant y Metta, que acababan por recibir el esférico. Algunos lanzamientos fueron más acertados que otros (véanse los 41 intentos de Bryant de los que entraron 16; 2-8 en triples; Metta llegó a los 20 puntos tras 7-13 en tiros de campo y 3-6 en triples). En una noche buena de los anotadores exteriores, esta manera de jugar hará mucho daño a sus rivales.

ALTERNATIVAS DE JUEGO
Y es que los verdaderos beneficiados gracias los pick and rolls son los jugadores más abiertos. Esa manera de descomponer la defensa rival debería incrementar de manera global las alternativas de lanzamiento de figuras con buen pulso como los ya mencionados y Jodie Meeks, que ya demostró en varias ocasiones su buen hacer desde más allá de la línea de tres. Además de las opciones creadas por a raíz de los pick and roll, desde el rango medio también habrá muchas oportunidades gracias Gasol o el propio Nash. Las penetraciones del base hasta la cocina serán otra baza a tener en cuenta.

VUELVE LA EFECTIVIDAD
El deseo de D´Antoni era superar los 110-115 puntos por partido. Desde que está en el banquillo lagunero, sus pupilos nunca fueron capaces de llegar a dicha marca. Frente a los Warriors, los Lakers llegaron a los 118 puntos tras el tiempo extra (aunque también permitieron 115 a sus rivales). Tal puntuación tuvo mucho que ver con la ofensiva liderada por el recién recuperado.

El regreso de Nash dejó varios aspectos positivos el sábado, ahora solo queda materializar las buenas sensaciones con más constancia. Comenzando por el martes ante los Knicks de Nueva York; en adelante.