LOS ÁNGELES-- Hacía mucho que no veíamos a Kobe Bryant anotar 40 puntos, concretamente desde el 26 de diciembre ante los Denver Nuggets; pero más tiempo ha pasado desde que Lakers de Los Ángeles no ganaban un encuentro con la Mamba Negra habiendo llegado a dicha cifra. La victoria ante Portland Trailblazers es la primera de la temporada que logran los laguneros con un Bryant encendido capaz de llegar a los 40 o más puntos en su casillero.

Se trata de la quinta ocasión que esto sucede, y en ninguna de las anteriores fue renta suficiente para empujar a los suyos hacia la victoria. Ni ante los Clippers o Indiana Pacers en noviembre, ni ante los Cleveland Cavaliers o Denver antes de Navidad.

"Fue genial, necesitábamos que anotara", señaló Steve Nash. "Logramos canastas muy importantes. Lo cierto es que no estuvimos tan acertados de cara al aro como suele suceder, Kobe estuvo suelto y nos vino muy bien", confesó el armador, que no tuvo una noche acertada tras lograr dos canastas sobre 11 intentos y seis asistencias.

Bryant comenzó la cita de lo más enchufado y su buen hacer tanto en el apartado defensivo como el ofensivo dificultó mucho las cosas a sus rivales. El lagunero desapareció en el segundo periodo, cuando alcanzó una asistencia y no logró ninguna anotación. Los dos últimos periodos brindaron la mejor imagen del líder de los Lakers, el Kobe más Kobe apareció en escena y, aunque llegó a perder cinco balones, se erigió como la piedra angular que suele ser.

"La Mamba apareció esta noche", comentó Antawn Jamison. "Fue capaz de contener la tormenta en el la primera mitad del partido, pero en la segunda mitad, salió mucho más agresivo y se lo puso difícil a Portland. De vez en cuando estaremos en escenarios de este tipo. A veces no hará falta que anote tanto, pero esta noche no estuvimos acertados ofensivamente, pero él apareció y nos puso por delante", destacó un Jamison que otra vez más saco petróleo de sus acciones saliendo desde el banquillo.

Kobe agarró la batuta de la manera que más le gusta y no escondió su satisfacción por la agresividad mostrada, la misma que ayudó a cerrar un encuentro que llegó a ponerse muy difícil con unos Trail Blazers impetuosos que forzaron 11 empates en el marcador y 27 cambios de liderazgo.

"Tuve que mostrarme más firme, pero al mismo tiempo hice que mis compañeros jugaran", señaló Kobe. "Por momentos tuve una noche desacertada en los lanzamientos, pero he estado teniendo este tipo de desaciertos en el último mes, así que es comprensible. Logramos sobreponernos", comentó.

"Tuvimos que empujar el encuentro. Ellos jugaron muy bien. Convirtieron lanzamientos muy difíciles que les mantuvieron pegados al encuentro pero logramos encontrar nuestro camino", apuntó. "Debemos encarar cada partido como si fuera un playoff. Debemos estar preparados, ir a la carretera y ver qué podemos hacer".

El próximo encuentro será el domingo ante Dallas Mavericks, un partido que no estará exento de polémica. Las últimas declaraciones de Mark Cuban en las que 'aconsejaba' a los Lakers a realizar una amnistía a Kobe para afrontar la campaña que viene sin una nómina tan elevada, no sentaron bien en el seno del equipo. Desprenderse del jugador para que el desembolso en sueldos (y el impuesto de lujo) no sea tan amplio no es precisamente lo que pasa por la cabeza de los dirigentes laguneros.

John Black, vocero del equipo, comentó antes del encuentro ante Portland que las declaraciones del propietario de los Mavericks fueron "desafortunadas". La batalla, deportiva, está servida.