GUADALAJARA -- La delegación mexicana ya comenzó a sumar medallas, la cosecha hasta el momento ha sido positiva, aunque se esperaba que para estas alturas el país anfitrión ya acumulara por lo menos alguna presea de oro, y creo que esto de estar en casa ha sido un arma de doble filo para los deportistas, ya que para varios atletas aztecas la emoción y la motivación se ha transformado en presión.

Es claro que ser locales significa un plus muy importante en cualquier justa deportiva, y también es obvio que ese factor influye a favor, ya sea como apoyo al deportista local o como presión para el rival o al juez.

Históricamente el país anfitrión siempre cosecha más metales que cuando compite fuera de su tierra, y seguro que en Guadalajara 2011 no será la excepción y los mexicanos sumarán una cantidad histórica de preseas, pero en estos primeros días, he visto a los atletas demasiado presionados, parece que cargan con una presión extra y creo que esto ha evitado que lleguen mejores resultados.

Y lo pudimos ver con Cynthia Valdez, quien iba dominando a placer el all around en gimnasia rítima y en el último aparato cometió dos errores que le costaron muy caro, lo presenciamos también en el taekwondo con Damián Villa, y esta mañana con Erick Osornio quien increíblemente fue eliminado en la primera ronda.

Parece que los deportistas aztecas están obsesionándose demasiado con el hecho de estar en casa y cumplir forzosamente con una sobresaliente actuación y esto está provocando el efecto contrario.

Esperemos que en cuanto caiga la primera medalla de oro, la presión sobre los atletas mexicanos disminuya, y la cosecha de oro ya no pare y se logre el ansiado metal áureo número 24 para de esta manera hacer historia y estos Juegos se conviertan en los más exitosos del deporte en México.