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Habrá dudas hasta que vuelva Nash

Kobe Bryant y los Lakers lucieron bien ante Dallas. ¿Cómo lucirán con Nash? Ronald Martinez/Getty Images

DALLAS -- Steve Nash hace una sombra de más de 6'3 cuando su último estilo de corte está recién peinado, viste bien, tiene un gran sentido del humor y es uno de los atletas con más conciencia social en el deporte profesional.

Un día entrará al Salón de la Fama. Mientras juegue, será uno de los mejores armadores en el juego.

Pero oír cómo Los Angeles Lakers, en particular el entrenador Mike D'Antoni, hablan de él en los últimos días, se ha convertido más en superhéroe mítico que un hombre.

"En Phoenix, no hubiésemos podido ganar sin él", dijo D'Antoni con tono reverencial. "Ni un sólo partido".

El sábado por la noche, los Lakers ganaron su séptimo partido sin Nash, una matanza de 115-89 a los Dallas Mavericks, que detuvo el sangrado después de dos derrotas consecutivas como visitantes esta semana. Pero no hubo celebración en el vestuario de los Lakers.

Alivio, tal vez. Y algunas sonrisas, claro.

Pero ha quedado claro para todos los involucrados que en realidad no sabremos nada de estos Lakers --los de D'Antoni-- hasta que Nash, quien ha estado fuera desde el 31 de octubre con una pierna fracturada, esté listo para liderarlos nuevamente.

"No", el escolta de los Lakers, Kobe Bryant, dijo cuando se le preguntó esta misma pregunta. "Este equipo, la idea de este equipo, fue construido con todos nosotros jugando juntos. Ahora mismo estamos jugando bien así. El jovencito, Darius Morris, está poniendo de su parte y dándonos un pequeño empujón.

"Pero cuando Steve regrese, las cosas van a cambiar. Tienes uno de los armadores más grande de todos los tiempos que ha estado fuera de la alineación. Esto cambia las cosas".

Así que, sí, la victoria del sábado ante los Mavericks se sentía bien. Los Lakers salieron con una intensidad defensiva que abrumó a los Mavericks desde temprano y compensó por su ofensiva, todavía en evolución. Tuvieron un tremendo anotador en Metta World Peace, quien terminó con 19 puntos al irse de campo en 10-7 disparos (cinco de tres puntos). Y disfrutaron de una agradable empujón desde el banco por parte de Antawn Jamison (19 puntos, 15 rebotes).

Pero esto fue sólo una victoria, no una declaración.

"Siempre es importante conseguir una victoria", dijo D'Antoni. "No se puede seguir perdiendo. Pero tenemos entrenamiento que atravesar, en el sentido en que falta un mes antes de hacer las cosas bien. Mientras tanto, tenemos que ganar tantos juegos como podamos y no entrar en un agujero demasiado grande".

Nash debería estar de vuelta antes de esa fecha. Está programado para ser re-evaluado el lunes, pero todavía está experimentando dolor en los nervios cerca de la zona donde se golpeó las rodillas contra el novato de Portland, Damian Lillard. No ha sido capaz de correr todavía, y mucho menos lanzar un balón de baloncesto.

En otras palabras, su regreso está más cerca, pero no es inminente.

"Estamos hacienda lo que podemos y esperamos que tenga el mismo efecto que tuvo en Phoenix", dijo D'Antoni.

Los de repente malogrados hombre grandes de los Lakers, Pau Gasol y Dwight Howard, tuvieron mejores partidos contra los Mavericks de lo que hicieron en los dos anteriores partidos fuera de casa, en los que se combinaron para anotar apenas 28 puntos en 20-10 disparos. Pero tampoco hicieron nada que pareciera una revelación. Gasol acumuló 13 puntos y nueve rebotes en 28 minutos, y Howard acumuló 15 puntos y siete rebotes en 32 minutos.

Y el asunto de que si cada uno obtendrá más acción en el poste está lejos de ser resuelto.

"Pau es un gran jugador y siempre será un gran jugador", dijo D'Antoni. "Vamos a seguir jugando y trabajando. Muchas de estas cosas las seguiremos arreglando también, cuando Nash y Blake regresen".

Aquí el estribillo, una vez más: Espera a que Nash vuelva.

Sería molesto si no fuese tan cierto.

"Quiero decir, en mi opinión, él es el que prácticamente inventó esta ofensiva", dijo Jamison. "Steve sólo crea muchas oportunidades fáciles para sus compañeros. Sabe cómo presionar a la defensa. Sabe dónde los chicos tienen que estar. Es casi como tener un entrenador en la cancha".

Para Gasol y Howard - los dos jugadores cuyos papeles han sido los más afectados por el cambio a la ofensiva de D'Antoni - eso sólo significa tener fe ... en Nash, en D'Antoni, en la idea de que van a ser capaces de hacer que todo esto funcione.

Después haber sentado a Gasol en el último periodo de la derrota del viernes ante los Grizzlies, D'Antoni se acercó a Gasol en el autobús del equipo para una pequeña charla.

Su mensaje fue simple:

"Mantente en esto", recordó Gasol. "Estamos en esto juntos".

Esperando a Nash.