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LOS ÁNGELES -- Los Ángeles Clippers están imparables. Inmersos en la mejor racha de la temporada, los angelinos volvieron a demostrar que este año van a por todas tras la complicada victoria en el Staples Center ante Phoenix Suns. Acumulan ocho encuentros vencidos al hilo y entre febrero y lo que va de marzo llevan un balance de 12-16. Saben lo que es ganar a equipos como Oklahoma City Thunder, Portland Trail Blazers o Houston Rockets, terceros con medio juego por delante de Clippers en la Conferencia Oeste y la ascensión de los californianos es meteórica. Blake Griffin sigue en un momento de gracia formidable. Ante los Suns alcanzó 37 puntos entre los que se incluye una clavada a una mano colocando la derecha en su nuca al más puro estilo Karl Malone. "Cuando los lanzamientos entran, lo que hay que hacer es seguir lanzando", reconoció Griffin. "Pero al mismo tiempo todos estaban anotando. Los chicos estaban afinados y nuestra ofensiva estaba funcionando", señaló. "Fue una locura", afirmó Chris Paul. "Ni me di cuenta de que logró 22 puntos en la primera mitad. Fue eficiente y hay que darle la pelota siempre", comentó el armador. La juventud, calidad y ansias por agradar que tiene el equipo dirigido por Doc Rivers les ha dado las alas necesarias para optar no solo a ocupar los cuatro primeros puestos de playoffs que dan derecho a ventaja de cancha, si no a luchar por la plaza más codiciada del complicado Oeste. "Cada noche sientes que alguno de los equipos tendrá un gran partido al día siguiente. Después de un tiempo te das cuenta de que siempre que juegas contra alguien del Oeste es un buen partido, porque son buenos y es difícil", apuntó un Rivers que prefiere quitarle presión a sus jugadores en cuanto a la posición final de la temporada regular. "Quedar entre los cuatro primeros no cambia mucho. Somos más jóvenes que otros equipos y no nos urge. Dicho esto, estaría bien tener la ventaja de cancha, pero no voy a prestar atención a eso", afirmó. El buen momento de los Clippers coincide con el de Houston (cinco victorias al hilo) y San Antonio (seis), mientras que el Thunder atraviesa su peor racha de la temporada con cinco derrotas en los últimos ocho partidos. Los Clippers están demostrando además que son capaces de sacar adelante los encuentros sufriendo, y es que no todas las victorias son como la que lograron ante los Lakers la semana pasada tras apabullarlos 142-94. Frente a Atlanta Hawks vencieron por un punto, y en la victoria de este lunes contra los Suns, de ir ganando por 25 puntos en el tercer periodo, la diferencia quedó reducida a cuatro puntos cuando restaban 20 segundos para el final de una cita en la que Griffin fue expulsado por acumulación de faltas en los momentos más tensos de la cita. Poco antes, el jugador de los Suns, P.J. Tucker, también fue expulsado por un encontronazo con Griffin, que recibió un golpe en la cara mientras ambos jugadores se revolvieron en el suelo. El jugador de los Clippers mantuvo la compostura. "Afrontas el juego tal y como viene. En ese momento no quise perjudicar a mi equipo. Tampoco me quise poner o en una mala situación. Valoré los pros y contras en ese puntos. No recuerdo por cuánto estábamos ganando, pero hacer algo estúpido y salir expulsado no ayuda al equipo. Ya tenemos jugadores lesionados y no necesitamos eso", declaró. Su compañero y antiguo rival, Willie Green, sabe perfectamente lo que significa medirse a Griffin y defendió la actitud del delantero. "Es para elogiar. Cuesta mucho poner la otra mejilla. Creo que llevó bien la situación y creo que los árbitros lo hicieron bien. Tienen que cuidar que los jugadores no se peguen entre sí", afirmó. Chris Paul logró 17 puntos y 11 asistencias, Darren Collison, 20 puntos y cuatro asistencias y DeAndre Jordan agarró 17 rebotes y convirtió ocho puntos. El miércoles, los Clippers tendrán un encuentro clave como locales ante Golden State Warriors antes de partir a Utah para jugar ante el Jazz el viernes, mientras que el domingo se medirán a Cleveland Cavaliers en el Staples Center.
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