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Kobe, inesperada baja en Navidad

El encuentro entre Kobe y Pau Gasol tendrá que esperar hasta enero en Los Angeles Andrew D. Bernstein/NBAE/Getty Images

LOS ÁNGELES -- Kobe Bryant no participará en el juego de Navidad ante Chicago Bulls. El coach de Los Angeles Lakers, Byron Scott, y el propio jugador llegaron a la conclusión de que era mejor no forzar ante los Bulls.

Kobe confesó que tiene molestias generalizadas en varias partes de su cuerpo y que "lo más sensato" es no forzar la máquina, aunque vaya en contra de su naturaleza.

Se trata del segundo partido consecutivo que la Mamba Negra se pierde tras no jugar en la cita ante Golden State Warriors del martes, donde el equipo jugó el mejor encuentro de la temporada en una victoria sorpresiva en la que hasta siete jugadores laguneros llegaron a los dobles dígitos.

Kobe está participando una media de 35.4 mpj y la idea es darle todo el descanso necesario para que vuelva a encontrar el estado de forma que mostró durante el comienzo de la temporada.

La presencia de Kobe en el quinteto titular ante los 'Toros' fue confirmada por Scott después de la conferencia de prensa, sin embargo, justo antes de quecomience el juego de Navidad, hubo un cambio de planes. Por esta razón, no se producirá el encuentro más esperado entre Pau Gasol y la Mamba Negra sobre la duela.

La última vez que ambos jugadores se enfrentaron fue el 13 de enero de 2008, poco más de dos semanas antes de que Pau fuera traspasado a Los Ángeles.

Ha llovido tanto desde aquel encuentro que vencieron los Lakers a Memphis Grizzlies (100-99) que es difícil poner un pliegue entre las dos épocas. Ambos jugadores tuvieron actuaciones destacadas. Kobe alcanzó 37 puntos y Gasol 21 unidades y 18 rebotes. Por aquel entonces, ninguno de los dos sabía que el futuro les depararía dos anillos, no eran conscientes de que sus caminos se iban a cruzar para forjar una amistad que tendría tintes de hermandad.

Pero así fue. La conexión entre ambos tardó en producirse, pero finalmente se consolidó en una fidelidad, una lealtad y un cariño difíciles de superar. No muchos jugadores pueden decir que cada Navidad reciben una postal de felicitación por parte de Kobe y muchos menos pueden fardar de que la Mamba Negra les haya escrito un prólogo como el que llevó a cabo en el libro 'Vida' de Gasol.

Competitividad, el mejor regalo

Todo este afecto quedará de lado durante los 48 minutos que dure el encuentro entre los Bulls y los Lakers. Aún no se sabe si quedarán a desayunar como Kobe hizo con Rajon Rondo -con quien volverá a encontrarse el viernes en la cita ante los Mavericks- o quién sabe si abrirán algunos regalos de Navidad juntos, pero lo cierto es que la competitividad que emana de los dos excompañeros se verá reforzada con la posibilidad de vencer al otro.

Kobe se encuentra en pleno periodo de asunción de su nueva realidad. El agotamiento que reflejó en los encuentros ante Oklahoma City Thunder y frente a Sacramento Kings obligó a que Scott tomara la decisión de gestionar no solo sus minutos de juego, sino la posibilidad de sentarle en algunos partidos. El primero fue ante los Warriors, y los compañeros de Kobe demostraron que están listos para asumir la responsabilidad de jugar sin él; también de quitarle más peso a sus piernas cuando la Mamba esté disponible.

Jugará ante Chicago después de haber descansado durante tres días completos. Aquel Kobe que brilló con 37 puntos en el último partido que jugó ante Pau tiene que hacer un esfuerzo extra para llegar a esa cifra en una temporada en la que, a pesar de ser el tercer máximo anotador de la competición con 26.4 ppj, Kobe es uno de los jugadores de la liga que más tiros falla por partido (37.2 por ciento en tiros de campo; 27.4 en triples).

Su rol está mutando poco a poco. Se trata de una consecuencia inevitable provocada por el paso del tiempo y sus 19 años en al máximo nivel. Su mente está acostumbrándose a delegar más en sus compañeros, a dosificar sus fuerzas y a mostrar su máximo nivel de manera más intermitente.

Gasol, clave en los Bulls

Pau, por su parte, se ha reencontrado con su mejor versión, ésa que quedó relegada al ostracismo en su última etapa en los Lakers, donde las decisiones de Mike D´Antoni y la pésima gestión de sus recursos, mostraron a un Gasol desencantado durante muchos momentos de su etapa final vestido de oro y púrpura.

Los Bulls viven un gran momento y Pau es pieza fundamental en el proyecto. Suman tan solo dos derrotas en los últimos 10 partidos y su producción está siendo muy destacable gracias a sus 18.0 ppj y 11.4 rpj.

Cuando está sobre la duela -es el segundo jugador que más participa tras Jimmy Butler con 35.4 mpj- , el equipo lo nota, y su comunión con jugadores como Joakim Noah, Taj Gibson, Nikola Mirotic o Doug McDermott es excelente.

En Navidad, Kobe y Pau se enfrentarán casi siete años después de su último partido como rivales (seis años y 11 meses).

A pesar de haber jugado 22 veces como contrincantes (12-10 a favor de Bryant), ambos han olvidado la sensación de medirse al otro. Ahora lo hacen con una carga afectuosa que no existió antes del paso del internacional español por los Lakers, un hecho que le hubiera dado más valor al enfrentamiento.