<
>

Costa Rica ya es finalista

Costa Rica sobrevivió al Grupo de la Muerte y llegó a cuartos de final Getty Images

BUENOS AIRES -- Escribo esta nota para todos los costarricenses e hinchas caribeños, centroamericanos amantes de la salsa y el fútbol. En Buenos Aries hace un frío mortal, un frío que congela los árboles y funde el motor de los autos. En cualquier momento, tenemos la nevada más grande en la historia de Buenos Aires. Ni siquiera Roberto Arlt, hubiese imaginado una cosmópolis rioplatense blanca y fría...

Mientras soportamos tenazmente las inclemencias del tiempo. Salgo a la calle porque soy un valiente y tengo que laburar. Camino por una calle helada, vacía y veo en un balcón un tico, en playeras, tomando sol en cuero. Me sorprendió muchísimo. En su balcón colgaba una bandera de 30 metros que decía "Ticos-argentinos, nos vemos en las semis".

Crucé la calle y mantuve un hermoso diálogo con este sujeto fuera de época.

-Oiga, compadre. Disculpe, mi nombre es Cucurto, ¿le puedo hacer un par de preguntas?
- Por supuesto, man, dígame en qué lo puedo ayudar.

Con la gentileza, la bondad infinita que tienen todos los caribeños, con esa simpatía sin límites. Se levanta de su reposera y me alcanza, apoyándose en la baranda, una coca cola con whisky. Un whiscola, como se le dice en el Caribe o un Cuba Libre.

Esto que escribo parece un invento mío, pero Buenos Aires es impredecible y está llena de personajes, situaciones y encuentros de esta naturaleza. Además, como si esto fuera poco, en momentos mundiales, la cuestión se vuelve al extremo.

-¿No tiene frío?, fue la primera pregunta que se me ocurrió y la más razonable, digamos la verdad.
-No, man, tuve una noche de sexo fatal con mi novia rosarina y me dejó acalorado. Además, usted, perfectísimo extraño ¿no ha visto en el nivel superlativo en el que estamos jugando?
-Claro, compadre, por eso me acerqué porque vi esa bandera tan llamativa con esa inscripción.
-Man, eliminamos a un equipo duro y peleador como son los griegos. Ahora nos toca Holanda y no te quepa la menor duda que los mandamos de vuelta a Amsterdam.
-¿No es mucho?
-¿¡Eh, vos está loco, man?! Vamos a jugar las semifinales contra Argentina.
-Sería fantástico.
-Claro, y les vamos a ganar...

Saludé a este simpático hincha costarricense y pensé que podría ser. ¿Por qué no? Costa Rica puede eliminar a Holanda tranquilamente. Tiene equipo, es la revelación y están en ascenso. Sería lindo una semi entre ticos y argentinos, algo nunca visto. Esa bandera colgada en el balcón me aclaró que, en materia deportiva, todo puede suceder. Para Argentina, en los papeles, sería fácil, casi un trámite, pero adentro de la cancha la historia será muy difícil.

Y si llegamos a las semis, yo quiero que los ticos nos ganen y jueguen la final, contra Brasil y ¡le ganen! Faltan dos partidos, no hay que soñar imposibles, pero si los ticos le ganan a Holanda, estoy seguro que nos dejan afuera a nosotros y de ahí, directo hacia la Copa.

Los holandeses son especuladores y aburridos. El último partido con México no merecieron ganarlo. Anular a Robben es la idea.

Costa Rica es la gran sorpresa de este Mundial. Es imprescindible para el fútbol y para el Mundo que Costa Rica siga subiendo en el campeonato. No sé si le convendrá a la FIFA que Costa Rica juegue una final. Todos esperan una final Argentina-Brasil, pero quién dice que puede ser una Costa Rica-Brasil.

Sería inolvidable. Todo el mundo alentaría para Costa Rica.

En fútbol, nada es imposible, a grabarlo.

Suerte, a los ticos y viva el fútbol.