|
Aficionados y Fanáticos al "Rey de los Deportes": A principios de junio leí un artículo en la página del Chicago Sun Times en el que se cuestionaba la labor de Rick Rentería como el nuevo manager de los Cachorros de Chicago para éste 2014. Concretamente la crítica se basaba en que, teniendo a uno de los mejores lanzadores en la campaña como Jeff Samardzija, al décimo mejor bullpen en las Ligas Mayores, a dos jugadores como Anthony Rizzo y Starlin Castro que habían arrancado muy bien, y a un Jason Hammel que excedía entonces todas las espectativas; ¿qué nos decía eso de un manager que tenía a su equipo con el peor record en las mayores? Cuando leí ese cuestionamiento, pensé por un momento que un derrame cerebral me había mantenido en estado vegetativo y que había despertado en septiembre, en plena recta final de la temporada. Así que inmediatamente chequé la fecha en mi calendario: 2 de junio. ¿Es posible que un escritor de beisbol en un medio considerado de los más importantes del país, realice tal cuestionamiento apenas a dos meses de temporada, con un manager que acaba de tomar las riendas del equipo, y en una organización que no ha ganado una Serie Mundial desde 1908? Era posible... recordé entonces de inmediato cuando buena parte de los mexicanos creyeron que Vicente Fox iba a cambiar al país en cuestión de semanas después de haber tomado posesión como presidente de la República en el 2000. No cabe duda que en todos los ámbitos, la política y la pelota incluídos, mucha gente vive todavía en un cuento de hadas. Esta semana tuve la oportunidad de platicar con Rick Rentería justamente antes de que sus Cachorros terminaran una barrida sobre los campeones de la Serie Mundial 2013 a domicilio. Evidentemente no iba a tocar el punto en cuestión, cuando se tiene a un manager de Grandes Ligas, hay que aprovechar las oportunidades y no desperdiciar el tiempo en cuestionamientos tan ilusos. Al momento de conversar con él, los Cachorros tenían mejor marca que los Rays de Tampa Bay, los Vigilantes de Texas, los Astros de Houston, los Mets de Nueva York, los Filis de Filadelfia, los Rockies de Colorado y los Diamondbacks de Arizona, por lo que en un mes, subieron siete posiciones en la etiqueta esa de "el peor equipo de las mayores". El único muerto que se ha levantado en cuestión de segundos fué Lázaro en la Historia Sagrada, y definitivamente Rentería no tiene esos poderes divinos que poseía el que revivió a Lázaro. Lo que el dirigente mexico-americano de los Cachorros está tratando de conseguir, lleva tiempo, requiere de muchos procesos previos y, sobre todo, de acuerdo al propio Rentería, de solidificar algunas bases que sus antecesores dejaron como "cabos sueltos". "Los muchachos se van conociendo uno al otro, van ganando confianza uno con otro y se siguen entregando día a día que es lo que yo les he pedido", nos comenta Rentería al momento de iniciar a hacer el balance de lo que ha sido la primera mitad de la temporada, con ese mismo rostro de confianza y con esa tranquilidad que nos demostró cuando platicamos con él durante el Spring Training. En un equipo en el que han tenido cuatro managers diferentes en las recientes 5 temporadas, lo más importante para Rick, y que nos quedó bien claro desde que comenzaron los entrenamientos en Mesa, Arizona, es ganarse la confianza de sus jugadores, que sientan que lo que su dirigente expone en sus ideas y en la forma de tratar a la gente es real. Rentería considera que tras casi 5 meses de trabajo juntos, sus peloteros han asimilado ese proceso y la confianza que tienen en él y en su forma de trabajar, los hace mantenerse positivos y dando el máximo esfuerzo todos los días. La efectividad colectiva de los Cachorros, 3.54, los coloca a media tabla en lo que se refiere a los equipos de la Liga Nacional, y lo sólido de su rotación de abridores, además de la forma en la que finalmente Rentería encontró los roles de su bullpen, hacen pensar que, dependiendo por supuesto de lo que suceda con Jeff Samardzija, el equipo del Norte de Chicago puede estar bien pertrechado en ese sentido. Es la ofensiva la que aún falta por consolidarse. Su bateo colectivo de .234 sólo supera a los Padres de San Diego en todas las mayores, lo cual no es nada para estar orgullosos, además de que son el cuarto con más ponches en la Nacional, pero el dúo dinámico de Rizzo y Castro deben retomar un nivel muy parecido al que tuvieron al inicio de la campaña, además de que la paciencia con la lesión de Emilio Bonifacio debe pagar dividendos cuando el dominicano regrese en buena forma. Los Cachorros no van a llegar a la Serie Mundial en ésta temporada. Pero habiendo dejado atrás ya a 7 equipos en lo que se refiere a victorias y derrotas en las Grandes Ligas, y con un timonel que nunca olvida sus orígenes mexicanos, que está orgulloso de representar a esa bandera tricolor y cuya familia lo apoya desde Michoacán, sabemos que ganarán mucho terreno en relación a los Cachorros de temporadas recientes. El carácter, la filosofía y la inteligencia de Rentería van a pagar dividendos inmediatos.
|
