Lecciones de la temporada pasada
Gus Poyet no necesita recordatorio de que si bien es loable haber alcanzado una final de copa y haber llegado muy cerca de otra, es peligroso que la supervivencia en la Premier League dependa de vencer al Manchester United y al Chelsea de visita durante los últimos partidos.
Los seguidores de Sunderland están programados por la historia para observar con ansiedad la última parte de cada nuevo calendario de partidos. El cierre de la próxima temporada también incluye una visita al Chelsea, esta vez en el último partido. Aunque suene poco ambicioso, el objetivo principal debería ser asegurar una posición cómoda algo más pronto. Eso se logrará si Poyet consigue restaurar un aspecto de fortaleza en el Stadium of Light, donde sólo ganaron cinco partidos la temporada pasada.
Alineación titular anticipada
¿Qué hay de nuevo?
A pesar del aclamado fichaje de Jack Rodwell del Manchester City, se debe hacer más. El progreso en el fortalecimiento de una escuadra que languideció al fondo durante la mayor parte de la temporada pasada ha sido lento y frustrante. Poyet insiste en que su participación en el mercado aún no ha terminado. Lo que queda de esta ventana sería alentador si incluyera el retorno, en alguna forma, de la estrella de préstamo de la temporada pasada, el talentoso y trabajador Fabio Borini.
Los préstamos no son populares entre los fans, pero el regreso de Santiago Vergini por otra temporada, tras la campaña exitosa que tuvo el año anterior, refuerza la defensa de cuatro de Poyet. Billy Jones, Jordi Gómez y Costel Pantilimon, quienes fueron contratados mediante pases libres tras haber sido liberados por sus equipos, y la compra de Patrick van Aanholt son todas adiciones inteligentes y el club tiene margen de maniobra para los salarios luego de haberse liberado de jugadores útiles pero limitados (sobre todo Phil Bardsley, Craig Gardner y David Vaughan.) Un par de importantes incorporaciones tardías harían maravillas para la moral.
Puntos fuertes
Las atajadas de Vito Mannone fueron el origen de buena parte de los puntos que sacaron dramáticamente de peligro a Sunderland. Pantilimon ofrece una sana competencia, y en ambos el club tiene las mejores opciones de portería desde que Craig Gordon y Simon Mignolet compitieron por el puesto. ¿Podrá Van Aanholt, fichado del Chelsea, finalmente demostrar en la Premier League las condiciones que tan cerca lo llevaron a jugar con Holanda? De ser así, su adquisición sería un logro enorme.
Jordi Gómez aportará parte de la calidad que tanto ha faltado en el mediocampo estas últimas temporadas. Con Rodwell a bordo y Lee Cattermole quien por fin está madurando --aunque esto ya se ha dicho antes-- tenemos indicios de un buen equilibrio entre agallas y calidad. También se justifica un cauteloso optimismo sobre las perspectivas ofensivas. Steven Fletcher, en forma otra vez, ha estado afilado. Y Poyet espera más goles de Borini, si es que lo fichan, y de Connor Wickham si se queda. Y, ¿podrá Jozy Altidore demostrar que es capaz de ser un delantero eficaz para Sunderland?
Puntos débiles
Como se esperan más compras, y algunos jugadores posiblemente estén en la puerta de salida, la incertidumbre nubla la forma probable de la escuadra de Poyet. ¿Borini estará de vuelta? ¿Podrá Poyet persuadir a Wickham de firmar una extensión de contrato (en el que sólo le queda un año)? ¿Sigue siendo Johnson un objetivo para otros clubes? ¿Quién más será incorporado? Hasta que se resuelvan estas cuestiones, el futuro inmediato es difícil de predecir.
El colapso en los esfuerzos por fichar a Cristian Rodríguez del Atlético de Madrid fue decepcionante, pero la decepción se esfumó un poco con la incorporación de Rodwell. Aún hay dudas. En la defensa central, sería una locura depender totalmente de Wes Brown y John O'Shea. Ambos deberían tener al menos una temporada más de experiencia en la Premier League y son profesionales sólidos. Pero también son propensos a las lesiones y Poyet necesita cobertura y competencia en estas posiciones.
Director técnico
Poyet puede sentirse orgulloso de sus logros desde que aceptó la difícil tarea de rescatar a Sunderland del lío en el que los dejó Paolo Di Canio. El 14° puesto fue sorprendente después de una temporada en la que al equipo hasta le resultó difícil salir del último lugar. Que hayan llegado a los cuartos de final de la FA Cup y a la final de la Capital One Cup, donde le impusieron al Manchester City un serio desafío por el trofeo, fue admirable. El gran escape fue impresionante. Ahora viene la parte difícil.
Di Canio también había impulsado al Sunderland a una supervivencia improbable, sólo para sufrir un comienzo catastrófico la siguiente temporada. Antes de él, Steve Bruce y Martin O'Neill tampoco habían logrado aprovechar la promesa inicial.
Di Canio al menos tenía la excusa de la influencia díscola de Roberto De Fanti como director de fútbol en las idas y venidas. Poyet insistió, y parece tener una relación más equitativa con el sucesor de De Fanti, Lee Congerton. Cuando el polvo se haya asentado, tendrá que demostrar su valía durante una temporada completa, con su propio equipo.
Jugador clave
Hasta que Jack Rodwell fue presentado con su nueva camiseta nro. 8 roja y blanca, Cattermole parecía ser el jugador cuyas condiciones, disciplina y estado físico podrían definir la próxima temporada. Para muchos un rufián reaccionario, a menudo da señales de calidad además de compromiso y pasión, y es un jugador capaz de frustrar ataques contrarios y de impulsar los contraataques de Sunderland.
Pero Rodwell ahora es la base sobre la que Poyet debe construir su plantilla. Su experiencia en lo más alto de la Premier League, y su participación en el fútbol internacional y de Champions League, sugieren que es un jugador que podría dar vuelta los partidos a favor de Sunderland. Desde que Jordan Henderson se fue al Liverpool que el club no contaba con un jugador tan potente de punta a punta. Es fundamental que se mantenga en forma y deje atrás sus problemas pasados en el muslo, pero un Rodwell disponible para casi todos los partidos podría ser el trampolín para una buena temporada.
Resultado proyectado: 13°
Steve Bruce lamentó el peso de las expectativas poco realistas de la numerosa afición del Sunderland que, en frío análisis, ha tenido que conformarse --al margen de las emocionantes campañas de promoción y los dos séptimos lugares consecutivos de Peter Reid en la Premier League-- con 40 años de anonimato en el medio de la tabla y, más comúnmente, con descensos sufridos o apenas evitados. Antes del final infeliz a su período como DT, también metió al equipo entre los 10 primeros y por esto nunca recibió el crédito merecido. La mayoría de los fans se conformarían con eso en mayo, como parte de un proyecto a más largo plazo; 13° sería un resultado más probable.