BUENOS AIRES -- "Veo difícil el mundial Uruguay-Argentina por los costos. No tengo dudas y lo puedo asegurar hoy: Uruguay puede organizar un Mundialito o algo especial pero no un Mundial" confesó Eugenio Figueredo, quien dejó la presidencia de la CONMEBOL para hacerse cargo de la vicepresidencia de FIFA tras la muerte de su antecesor, Julio Grondona.
La idea de que Uruguay y Argentina sean sedes del Mundial 2030, surgió porque en 2030 se cumplirá un siglo de la primera Copa del Mundo celebrada en el propio país oriental, donde los Celestes vencieron a Argentina en la final por 4-2.
Según Figueredo, número dos de la FIFA, la posibilidad de que Sudamérica organice un nuevo mundial dentro de 16 años es casi imposible.