MANDEVILLE -- Drew Brees no parece mostrar señales de rezago tras una ausencia de dos semanas por esguince de oblicuo.
El mariscal de campo de los New Orleans Saints se ha visto fino en la práctica de esta semana, especialmente el miércoles por la noche cuando lanzó un puñado de touchdowns muy lindos en ensayos de equipo completo, incluyendo un balazo hacia la derecha directo al vientre del receptor Robert Meachem. Sin embargo, uno de los pases que Brees intentó lanzar a Jimmy Graham fue rechazado por el estelar de ese día, el profundo Jairus Byrd.
Incluso, hubo un punto en que Brees se encarriló para ganar yardas por el centro.
Después del entrenamiento, el coach de los Saints, Sean Payton, confirmó lo obvio: Brees está "listo para jugar" la noche del sábado contra los Indianapolis Colts.
Se espera que Brees juegue casi una mitad, lo que corresponde a su típico esfuerzo en el tercer partido de exhibición.
"Creo que nos vimos muy finos esta noche. Hubo un par de envíos excepcionales", consideró Payton, quien destacó la forma en que Brees ha ido incrementando su carga de trabajo en las últimas dos semanas. "Pienso que lo manejamos de forma adecuada, y él es muy inteligente y sabe en qué punto se encontraba. Mi única preocupación es [si] nos fijamos en un partido y eso no debió dictar su curación realmente.
"Ahora, sucede que está listo para jugar. Estoy seguro que lo hará y ya veremos cuántas jugadas por partido. Pero se vio muy fino esta noche".