RÍO DE JANEIRO (EFE) -- Sao Paulo empató 1-1 con el Figueirense, dejó el segundo lugar a manos del Internacional, que venció por 0-1 al Palmeiras este sábado, y también hizo más líder de la liga brasileña al Cruzeiro, que goleó 4-2 al Chapecoense.
La nueva victoria del Cruzeiro el sábado había dejado al Sao Paulo con la obligación de vencer hoy al Figueirense para no perder el ritmo del líder, pero a pesar de contar con el regreso de Kaká, que estaba lesionado, nada le salió bien al equipo paulista.
Tras una primera etapa sin goles y de dominio alternado, el Sao Paulo recibió un mazazo en el primer minuto de la segunda etapa, cuando Giovanni Augusto puso en ventaja al Figueirense.
A partir de ese momento, el Sao Paulo fue desesperación y uno y otro intento por lograr el empate a trompicones, sin orden, pero con un esfuerzo que finalmente dio frutos mediante un penalti convertido por el portero goleador paulista Rogério Ceni en el minuto 76.
Tras el empate, el partido volvió a la tónica de la primera etapa y ninguno de los dos equipos arriesgó demasiado. El resultado dejó al Sao Paulo estacionado en 33 puntos y le sirvió al Internacional, que este sábado venció al Palmeiras por 0-1 y llegó a 34 para asumir el segundo lugar.
El más beneficiado por todo fue el Cruzeiro, que con la goleada al Chapecoense llegó a 42 puntos y estiró a ocho unidades su ventaja en la cima de la clasificación, que hasta jugarse esta jornada era de siete.
También hoy se enfrentaron el Corinthians y el Fluminense, dos equipos que bregaban por acercarse al líder y que ahora lo ven más lejos.
Empataron 1-1 en un partido intenso, disputado y parejo, que sin embargo no dejó conformes a ninguno de los dos. Fred anotó de penalti para el Fluminense y Romario igualó para el Corinthians, que suma ahora 32 puntos, frente a los 30 que alcanzó su rival de hoy.
En la parte media de la clasificación, fue un muy buen día para el Flamengo, que tras un pésimo arranque de temporada encadenó hoy su quinta victoria consecutiva al derrotar al Vitória por 1-2 y llegó a 24 puntos, que lo alejan de la peligrosa zona del descenso.
El torneo condena con la pérdida de la categoría a los cuatro últimos de la clasificación, puestos que tras la decimoctava jornada ocupan el Criciúma, el Coritiba, el Bahía y el Vitória.