SEVILLA -- La selección griega obtuvo su segunda victoria, por 82-70, en dos jornadas de la Copa del Mundo a costa de Filipinas, que cuenta sus apariciones por derrotas, en un encuentro en el que los asiáticos pagaron su baja anotación del primer periodo, en el que acumularon una desventaja que los lastró toda la noche.
Filipinas calcó el inicio errático en ataque que terminó pagando caro ante Croacia, con su estrella Andray Blatche intentando acciones imposibles y facilitando con sus pérdidas los contraataques griegos, que marcaban una confortable diferencia de 10 puntos (10-20) al final del primer parcial.
De la mano de Printezis, muy versátil, y de un Papanikolau que se aprovechó del escaso ardor defensivo de Blatche, los helenos mantuvieron su ventaja e incluso dieron la sensación de estar guardando fuerzas para los encuentros más comprometidos de esta primera fase.
Fotis Katsikaris, el entrenador griego, repartió los minutos de forma equitativa entre sus jugadores sin que los constantes cambios mermaran una renta que, por el contrario, iba en aumento a medida que se mitigaba el ardor filipino.
Un triple de Chan y una técnica doble para Zisis y Pingris, que se enzarzaron en una bronca, animó a Filipinas al comienzo de periodo final, pero el regreso a la cancha de Printezis, que terminó como máximo anotador del choque con 25 puntos, decantó definitivamente la balanza.