<
>

Serie A, fichajes sin grandes nombres

El mercado de pases europeo estuvo particularmente movido en la liga italiana, con rumores y apellidos que aparecían tan rápidamente como desaparecían, casi como si fuesen un mito, y el Mundial de Brasil sólo sirvió para exacerbar esos supuestos pases que sólo quedaban en la imaginación creativa de la gente.

Sin embargo, en medio de todo el caos el Calcio sí tuvo transacciones que no sólo alteraron el panorama de la Serie A, sino que también sacudieron al status quo del fútbol mundial con la fuerza de un terremoto que alteró el panorama de la temporada que acaba de comenzar.

Por ejemplo, el Milan lidió con su frustración por terminar la campaña pasada en octavo lugar reforzando y renovando su columna vertebral para que su flamante técnico Filippo Inzaghi tenga un núcleo estable.

Inzaghi es un técnico novato, así que lo primordial era remover a un goleador impredecible dentro y fuera de la cancha como Mario Balotelli, quien se marchó al Liverpool a cambio de 20 millones de euros, e incorporar a un veterano confiable como Fernando Torres, quien llega con sus 169 goles al conjunto rossonero a préstamo por dos años proveniente del Chelsea. Torres no está al nivel de Balotelli, pero quizás su llegada sea lo que el Milan necesita hoy por hoy.

En los papeles, el conjunto rojinegro se reforzó bien, pero queda por verse si la cantidad de incorporaciones se traduce en calidad dentro de la cancha.

Además de Torres, el Milan también aprovechó las piezas que a otros grandes de Europa le sobraban como Diego López, el ex arquero del Real Madrid, y dos ex integrantes del PSG como el defensor brasileño Alex y el mediocampista Jeremy Menéz. Tampoco se puede menospreciar la llegada del colombiano Pablo Armero a préstamo desde el Udinese ni la cesión de un prometedor joven como el holandés Marco van Ginkel, otro jugador proveniente del Chelsea a los 21 años de edad.

Juventus, campeón defensor del Calcio con 102 puntos, ganó el último campeonato con una ventaja de 17 unidades sobre su más inmediato perseguidor pero fue inteligente al no dormirse en los laureles y también contó con un verano productivo.

La Vecchia Signora ya cuenta con dos delanteros de alto calibre como Carlos Tévez y y Fernando Llorente, así que le dijo adiós a un artillero frustrante e inconsistente como Mirko Vucinic vendiéndolo y también se despidió de Pablo Quagliarella, dos transacciones con una ganancia total de 8.5 millones de euros.

La Juve aprovechó ese dinero y gastó 20 millones para reforzarse con el heredero de la camiseta número 9, Alvaro Morata, proveniente del Real Madrid. Morata actualmente lidia con una lesión en la rodilla que no le permitió debutar en la primera fecha contra el Chievo Verona, pero será un gran complemento para el Apache y Llorente una vez que se recupere.

Igual, ojo, si Morata juegue demasiado bien existe una clausula que le permitiría al Real Madrid repatriar a su ex delantero por 30 millones de euros en el 2015 o en el 2016.

El Inter tampoco se quedó atrás y le agregó actitud a su plantel con la llegada de dos jugadores provenientes del fútbol inglés como el volante chileno Gary Medel por 10 millones de euros y un defensor veterano que quedó libre del Manchester United como Nemanja Vidic. El pobre de Vidic llegó a Italia y su regalo de bienvenida fue quedarse encerrado en un ascensor por dos horas, así que el Inter espera que ese tipo de mala suerte no lo persiga hasta el campo de juego.

Un factor relativamente inesperado fue la cesión de Ricky Álvarez, quien jugó el Mundial con Argentina este año, al Sunderland de Inglaterra.

Otra clave del verano para el Inter fue retener a Mauro Icardi y ejecutar el regreso de Dani Osvaldo al fútbol italiano a préstamo desde el Southampton para que ellos acompañen a Rodrigo Palacio en ataque. Icardi estará bajo la lupa y debe dejar las lesiones atrás para dar un salto de calidad esta temporada, o sino el no quedarse en el Inter de por vida ya podría no ser una decisión exclusivamente suya.

También vale la pena mencionar a la Roma, ya que el conjunto de la capital italiana pudo haber pagado de más por Juan Iturbe. Iturbe llegó sobrevalorado desde el Verona a cambio de 22 millones de euros, un precio que quizás haya sido demasiado alto por un jugador joven de apenas 21 años que marcó ocho goles en 33 partidos la temporada pasada.

Además, él no cuenta con experiencia previa en clubes grandes del fútbol del Viejo Continente. Básicamente, la Roma pagó dos millones de euros más por un delantero menos prometedor que Morata.

El Torino también hizo una tarea destacable al repatriar a Quagliarella, quien regresa al club que lo vio debutar en Primera a los 16 años en 1999 por 3.5 millones de euros, e incorporando a un volante de ida y vuelta con potencial como el argentino Juan Sánchez Miño, proveniente de Boca Juniors por apenas 3.2 millones, una buena inversión a futuro por un prometedor jugador de 24 años.

El gran mérito del conjunto turinés fue vender al atacante Ciro Immobile al Borussia Dortmund por 19.5 millones de euros, consiguiendo de esa manera un superávit general de más de 10 millones en sus transacciones del mercado de pases y de 16 millones en el ¨intercambio¨ de Quagliarella por Immobile.

Estos fueron los cinco equipos que ¨ganaron el verano¨ en Italia, y a partir de ahora solo queda por verse cuales serán los réditos que estos equipos reciben de parte de sus respectivos refuerzos.