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Semifinales, día 1: tres y tres

El anfitrión del Mundial está viendo el torneo por tv, pero Estados Unidos, el campeón defensor, sigue más vigente que nunca y demolió a Lituania con autoridad por 96-68 para convertirse en el primer finalista de la competencia.

Repasemos las tres cosas buenas y las tres malas de una semifinal que se llevó a cabo en Barcelona y provocó que todos tengan un deja vu colectivo viendo jugar a una selección que jugó como un verdadero Dream Team.

3 COSAS BUENAS

El tercer cuarto arrollador de EE.UU.

El primer tiempo prometía intriga y drama, el partido se jugaba al ritmo de Lituania y Estados Unidos ganaba por apenas ocho puntos tras encestar apenas un 33 por ciento de sus tiros en la primera mitad.

El tercer cuarto tuvo menos intensidad que la defensa de James Harden, y de repente un parcial norteamericano de 33-14 liquidó el partido y a otra cosa.

Klay Thompson y James Harden, las figuras

Thompson ha tenido un gran Mundial hasta ahora y fue primordial para mantener a Estados Unidos arriba en el marcador durante unos primeros 20 minutos inconsistentes colectivamente.

El escolta de los Golden State Warriors anotó todos y cada uno de sus 16 puntos durante la primera mitad, demostrando la pericia y el temple de un veterano. Con razón los Warriors no lo querían incluir en un canje por Kevin Love.

Harden tuvo unos dos cuartos iniciales brutales con más faltas (tres) que puntos (cero).

Todo eso cambió en el tercer cuarto y el alero de la selección estadounidense se destapó con 16 puntos en 10 minutos, demostrando que cuando él se pone las pilas no hay nadie que sea mejor que él ofensivamente en el torneo y posiblemente hasta quizás en la NBA.

Mindaugas Kuzminskas, el consuelo lituano

Ser goleado nunca es placentero para nadie, pero Kuzminskas tuvo una noche que él difícilmente pueda olvidar.

El jugador lituano no había pisado la cancha contra Turquía y había anotado un total de apenas 12 puntos en 45 minutos durante todo el torneo, pero esta vez él se destapó con 12 puntos en el primer tiempo y fue el principal responsable de que Lituania se mantuviera a tiro de su rival mientras pudo.

Kuzminskas terminó el partido con 14 puntos y habiéndole demostrado a su entrenador y a su país que él es capaz de contribuir en el partido del sábado por el tercer puesto.

3 COSAS MALAS

Lituania perdió el control

Tal y como mencionábamos anteriormente, Lituania perdía por ocho, pero dictaba el ritmo del partido y atacaba la canasta en la primera etapa, lo que compensaba por sus 12 balones perdidos en esos 20 minutos iniciales.

Sin embargo, el conjunto europeo dejó de dictar el ritmo desde el primer segundo del tercer cuarto, dejó de atacar la canasta y terminó el encuentro con 21 balones perdidos, seis más que su oponente y simplemente demasiados para poder sobrevivir.

Y perdió la batalla de los rebotes

Francia sorprendió a España porque lo mató en el rubro de los rebotes, por 49-29 para ser más exactos. Bueno, Lituania hizo lo opuesto y perdió esa batalla por 50-38, permitiendo que su rival baje 18 rebotes ofensivos.

El Miami Heat se puede dar el lujo de no bajar rebotes y ganar en la NBA, Lituania no puede decir lo mismo en el Mundial de la FIBA.

La noche olvidable de Derrick Rose

El base de los Chicago Bulls da un paso adelante y dos atrás en este Mundial.

Rose parecía haber renacido contra Eslovenia el martes con 12 puntos y encestando seis de sus 10 tiros, pero este jueves la peor versión del jugador de 25 años volvió a decir presente con apenas cuatro puntos y uno de ocho intentos acertados contra Lituania.

Es posible que criticar a alguien tras una victoria por 28 puntos suene como buscar la aguja en un pajal, pero será cuestión de hacer borrón y cuenta nueva para D-Rose antes de la final del domingo en Madrid.