BARCELONA -- Campeón de la Liga en Chipre en cuatro de las seis últimas temporadas, el APOEL ha tomado en los últimos años el papel dominador del fútbol local, desbancando al Omonia y tomando su papel protagonista en Europa. Su debut en esta fase de grupos de la Champions le lleva por primera vez a Barcelona y a pesar de su teórica debilidad en comparación al gigante azulgrana, la historia demuestra que no es, de entrada, un rival de andar por casa.
El APOEL alcanzó en la temporada 2011-12 los octavos de final contra todo pronóstico, cayendo ante el Real Madrid (0-3 y 5-2) después de clasificarse en su fase de grupos en primer lugar, por delante del Zenit, el Oporto y el Shakhtar dando una sorpresa mayúscula. Aquel curso venció en casa al Zenit (2-1) y al Oporto (2-1), empatando en Ucrania (1-1), Portugal (también 1-1) y Rusia (0-0), dando a entender que ya no era un simple convidado de piedra como pudiera pensarse.
Dos años antes, sin embargo, había ya dado su primer aviso. En la temporada 2009-10 el APOEL acabó en último puesto del grupo D por detrás de Chelsea, Oporto y Atlético de Madrid, pero fue capaz de empatar (0-0) en el Vicente Calderón y de repetir hazaña en Stamford Bridge (2-2), remontando en los 7 últimos minutos el 2-0 con que se había avanzado el equipo dirigido entonces por José Mourinho.
Dirigido por el griego Giorgios Donis, el equipo chipriota cuenta con la mejor plantilla de su historia tras autogestionarse con los 28 millones de euros que le supusieron los premios por participar en sus mejores campañas en la Champions.
Con el ex azulgrana Urko Pardo en la portería y los fichajes de Djebbour, Efrem, Carlao, Papazoglou y Riise (que mañana no podrá jugar en Barcelona), el APOEL, en palabras de su técnico, sabe de la utopía de puntuar "porque nos enfrentamos a uno de los grandes favoritos de la competición" pero en el que será su estreno en el Camp Nou acude "sin miedo y con ilusión".
De hecho, solo dos equipos chipriotas han jugado en Barcelona. El primer precedente se remonta a la temporada 1982-83, en la Recopa de Europa y supuso un incontestable 8-0 para el Barça de Maradona sobre el Apollon Limassol. Diego anotó 3 de los goles del Barça, que completó la goleada a través de Schuster (2), Urbano, Marcos y Alexanco.
El siguiente precedente, también en la desaparecida Recopa, se produjo en 1996. El Barça de Bobby Robson y Ronaldo disputó la primera eliminatoria frente al AEK Larnaca en el Estadio Olímpico de Montjuïc, venciendo el equipo azulgrana por 2-0, con ambos goles marcados por Ronaldo y Luis Enrique formando parte del conjunto que acabaría conquistando el título en Rotterdam frente al PSG.
El APOEL, que estará acompañado de 1.500 aficionados, contempla el pase a octavos de final como un milagro, por cuanto al Barça se suma en el grupo el PSG y el Ajax, por lo que soñar con la tercera plaza que diera acceso a la Europa League sería el gran objetivo de un equipo en crecimiento... pero que se sabe a una eternidad de distancia del gigante azulgrana.