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La NFLPA apeló la suspensión indefinida del corredor Ray Rice

BALTIMORE -- La Asociación de Jugadores de la NFL (NFLPA por sus siglas en inglés) apeló la suspensión indefinida del corredor Ray Rice este martes por la noche.

Rice originalmente fue sancionado con una suspensión por dos partidos en julio de acuerdo a las políticas de conducta personal de la NFL, luego de que fue acusado de agresión después de una pelea el 15 de febrero con su entonces prometida en el elevador de un casino.

El entonces corredor de los Baltimore Ravens ya había cumplido con el primer partido de su suspensión cuando, el 8 de septiembre, se publicó un video que muestra a Rice golpeando a Janay Palmer, su ahora esposa, dentro del elevador.

En cuestión de horas, los Ravens cortaron a Rice y el comisionado de la NFL, Roger Goodell, extendió la suspensión de manera indefinida con base en la "nueva evidencia".

Goodell y los Ravens sostienen que nunca vieron el video antes del 8 de septiembre.

"Esta acción tomada por nuestro sindicado es para proteger los derechos del debido proceso de todos los jugadores de la NFL", declaró la NFLPA en un comunicado. "La apelación de la NFLPA está basada en el apoyo a hechos que revelan la falta de un proceso justo e imparcial, incluyendo la participación de la oficina del comisionado de la NFL. Hemos pedido que un árbitro neutral y seleccionado conjuntamente escuche el caso ya que el comisionado y su equipo serán testigos esenciales en el procedimiento y por lo tanto no pueden fungir como árbitros imparciales".

La NFLPA indicó que el contrato colectivo de trabajo requiere que una fecha de audiencia sea establecida dentro de los 10 días posteriores a la notificación de la apelación. También señala que la audiencia requerirá un árbitro neutral para determinar qué información estaba disponible para la NFL y cuándo estuvo disponible.

Tanto la NFL como el sindicato de jugadores están de acuerdo que Rice permanecerá suspendido indefinidamente mientras la apelación se resuelve, indicaron fuentes de la liga y del sindicato a Ed Werder de ESPN.

El sindicato, que tenía hasta las 11:59 p.m. de este jueves para presentar la apelación, agregó que de acuerdo al contrato colectivo vigente, un empleado no puede ser castigado dos veces por la misma acción cuando todos los hechos estaban disponibles para el empleador al momento que se emitió el primer castigo.

Rice puede solicitar su reinstalación cuando convenza a Goodell que está "atendiendo el problema". Rice ha sido aceptado en un programa que una vez completado puede llevar a que los cargos de agresión sean retirados.

La NFL ha estado bajo fuerte escrutinio por su manejo de la situación de Rice --y otros casos de violencia doméstica-- mientras la liga intenta atraer a la afición femenina al juego. Es un esfuerzo que ha sido marcado por la suspensión original de dos partidos, un castigo que muchas organizaciones femeninas consideró demasiado ligero.

En una carta enviada a los propietarios de los 32 equipos de la NFL en agosto, Goodell reconoció que "se equivocó".

Después anunció una nueva política, indicando que los infractores de violencia doméstica por primera ocasión enfrentarían una suspensión de seis partidos, y los reincidentes serían suspendidos indefinidamente.

La política no se aplicó a Rice, quien ya había recibido su castigo.

Al parecer no hay ningún precedente para la suspensión indefinida que recibió Rice después que el video se hizo público.

Con todas las preguntas acerca de quién sabía qué y cuándo --The Associated Press reportó que el video fue enviado a oficiales de la NFL en abril-- la liga contrató al ex director del FBI, Robert Mueller, para investigar la manera en la que la NFL buscó y manejó las pruebas en el caso de violencia doméstica.

Poco después de recibir la suspensión original, Rice se refirió a sus acciones en el elevador como "inexcusables" y se disculpó públicamente con Janay, su madre, sus compañeros y la organización de los Ravens.

También se refirió a la duración de su suspensión, que vino acompañada de una multa por el equivalente a su cheque por tres partidos, totalizando más de 500,000 dólares.

"Nunca pensé en apelar el castigo", expresó Rice el 31 de julio. "Así que si fueran dos partidos, cuatro partidos, seis partidos, ocho partidos, iba a ser responsable por mis acciones y ser un hombre, aceptando lo que sea que me aplicaran".

En ese momento, habló sobre el daño que recibió su reputación.

"A los ojos de algunas personas, Ray no puede hacer nada malo. Eso es algo que me enorgullece", refirió. "Sé que mucha gente allá afuera ha perdido el respeto, quizás ya no les agrado. Pero ese es mi error. Tengo que ser responsable. Es mi batalla cada día".

Es una batalla que ha emprendido recientemente fuera del ojo público. Aunque asistió a un partido de fútbol americano en su ex preparatoria con su esposa el pasado fin de semana, no ha hablado con los medios desde que fue cortado por los Ravens.

Información de AP fue utilizada en la redacción de esta nota.