BARCELONA -- Tres jornadas de Liga han sido suficientes para que en el Espanyol se enciendan las luces de alarma y su entrenador cambie los hábitos que impuso en el vestuario al comenzar la temporada. El Espanyol se enfrenta mañana al Málaga con la necesidad de sumar su primera victoria y Sergio González decidió ayer que este viernes los futbolistas se concentrasen en un hotel, algo que anunció no querer hacer cuando comenzó el curso.
El nuevo entrenador periquito rompió una norma de su antecesor, Javier Aguirre, quien mantenía la costumbre de dar a conocer la lista de convocados con uno o dos días de anterioridad al partido cuando éste se disputaba en Cornellá y además concentraba a sus jugadores en un hotel cercano al estadio la noche anterior.
González explicó en su día que prefería que sus deportistas mantuvieran la normalidad familiar y así, en el partido que enfrentó al Espanyol con el Sevilla el entrenador ni dio a conocer la convocatoria ni concentró al equipo la noche anterior al encuentro. En la misma mañana del mismo la plantilla fue citada en el estadio para llevar a cabo una sesión de entrenamiento y después se facilitó la lista de convocados.
El resultado (1-2) y las sensaciones futbolísticas que dejaron el choque frente al equipo andaluz no gustaron ni a la directiva del club blanquiazul ni, obviamente, al cuerpo técnico y el entrenador consensuó con su equipo de trabajo cambiar la preparación de cara a los siguientes encuentros como local. Al menos de momento.
Desde en seno del Espanyol se pide calma y comprensión con el trabajo de Sergio González, recordando que las dos derrotas consecutivas se han encajado ante equipos de mayor presupuesto y potencial deportivo, pero desde el entorno no se oculta un grado de preocupación por lo que se entiende una alarmante disminución en lo que a la intensidad en el campo se refiere.
MANDO
El vestuario no es ajeno a la sensación que existe alrededor del equipo y ante el partido de mañana el entrenador recuperará para el once inicial a Felipe Caicedo, cuyo rendimiento en este inicio de curso no ha sido el esperado, que formará dupla de ataque con el imprescindible Sergio García (lleva anotados 2 goles).
Más allá de querer fijar a la defensa andaluza con los dos delanteros, la intención de González es conseguir de una vez ganar la batalla en el centro del campo para ser el protagonista del partido y es en este aspecto que el plantel ha trabajado especialmente los últimos días.
"Es importante mejorar la impresión que se deje al aficionado, pero más lo es ganar para remontar en la clasificación" admitió una fuente próxima al vestuario blanquiazul, firme en la convicción de que el equipo trabaja en la dirección correcta y solo esta falto de mando en el terreno de juego para dar ese paso adelante.