BARCELONA -- El Chelsea quiso fichar el pasado verano a Leo Messi por expreso deseo de Jose Mourinho y tuvo preparada una oferta de 150 millones para el FC Barcelona, al margen de lo que pudiera ofercerle al jugador argentino. Esto es al menos lo que desveló el jueves por la noche TV-3, el canal de televisión de Catalunya, que aseguró que el entorno del propio Leo se planteó durante la pasada temporada forzar su salida del club azulgrana.
La relación entre Messi y el Barça, a partir de la denuncia por fraude a Hacienda y los desacuerdos en su contrato con el club, pasó por muchas dificultades la pasada temporada. ESPN ya informó en su momento que sus asesores se sintieron ninguneados por la directiva y el punto álgido se vivió a finales de diciembre, cuando un directivo, Javier Faus, llegó a poner en cuestión la conveniencia de retocar el contrato del futbolista.
"El señor Faus no sabe nada de fútbol", le disparó desde Argentina el propio Leo y tuvo que ser el nuevo presidente del club, Josep Maria Bartomeu, quien tomase en primera persona el asunto para reconducir una situación que llegó a ser más que tirante y que provocó que apareciera en primer plano el PSG como posible destino del crack, quien no escondió durante muchos meses su alejamiento de la entidad.
La recta final de la temporada traspasó el desencuentro del argentino hasta la grada, parte de la cual llegó a criticar su rendimiento en el campo y provocó que en algunos sectores del barcelonismo se encendiera el debate acerca de la posibilidad de traspasarlo... Pero no pasó de ahí.
Con el paso del tiempo, con el acuerdo en la modificación de su contrato y el inicio de la nueva temporada las cosas parecen haber regresado a su cauce. La imagen tanto personal como futbolística de Messi recuerda al pasado y en el Barcelona, desde el banquillo y hasta la grada, pasando por los despachos, existe tranquilidad respecto al jugador.
Pero de vez en cuando salen a la luz capítulos que dan que pensar si ciertamente Leo llegó a tener un pie fuera del club. Jose Mourinho, quien en su día le acusó de "teatrero" fue, según la información de TV-3, quien pidió directamente a Abramovich un esfuerzo económico para acometer su fichaje, pero la posibilidad quedó finalmente descartada por el propio Messi. Y por el Barcelona, que oficialmente expresó su intención de mantener "durante muchos años" al crack en el club.