ALAMEDA -- Finalmente, se agotó la paciencia para los Oakland Raiders.
Después de un viaje a Londres que culminó con una derrota de 38-14 ante los Miami Dolphins que hundió a los Raiders a una marca de 0-4 en la tercera campaña de Dennis Allen con el club, los Oakland despidieron a su entrenador en jefe.
Versiones acerca de un inminente despido de Allen empezaron a circular en redes sociales el domingo por la noche. Fox Sports fue el primer medio en anunciar el cese de Allen en Oakland el lunes por la noche. El despido fue confirmado por Adam Schefter, de ESPN.
Allen fue contratado para dirigir a los Raiders para el inicio de la campaña del 2012, después de apenas una temporada como coordinador defensivo de los Denver Broncos. Al frente de Oakland, Allen compiló una marca de 8-28.
"Lamento escucharlo", dijo el receptor abierto Denarius Moore a Josina Anderson de ESPN al enterarse del despido. "Digo, es en momentos como este cuando te pones a pensar en su familia y cómo los va a mantener, y qué va a suceder de aquí en adelante".
Después de la derrota ante los Dolphins, Allen dijo a reporteros no sentirse preocupado por perder su empleo, de acuerdo a Bill Williamson de ESPN.com.
Los Raiders no perdieron tiempo para nombrar a su entrenador en jefe interino, al elegir al ex entrenador de línea ofensiva y entrenador en jefe asistente Tony Sparano para desempeñar el cargo. Oakland disfrutará su jornada libre en la Semana 5, tiempo que deberá servir para reagruparse. Sparano ya tiene experiencia en el cargo de entrenador en jefe de la NFL.
Además, el descanso es bienvenido para el mariscal de campo Derek Carr, quien abandonó el encuentro ante Miami por lesión en el tobillo. Su lugar fue ocupado por Matt McGloin, quien inició seis encuentros en el 2013, su campaña de novato, compilando una marca de 1-5 al frente de los Raiders.
La responsabilidad de nombrar al entrenador en jefe interino recayó sobre el propietario Mark Davis, y el gerente general, Reggie McKenzie, quien fue confirmado en su puesto al poco tiempo de ser anunciado el despido de Allen.
Davis asumió control del club a la muerte de su padre, Al Davis, mandamás de los Raiders desde 1963 hasta su muerte en el 2011, primero como entrenador en jefe y después como administrador y dueño de la franquicia.
McKenzie fue apuntado gerente general en enero del 2012, apenas unas semanas antes de que Oakland designara a Allen como entrenador en jefe. Previamente, fue ejecutivo para los Green Bay Packers y apoyador para los Raiders en la década de los '80s.
Allen se convierte en el séptimo entrenador en jefe de los Raiders que fracasa en completar tres temporadas al frente del club, siguiendo a Bill Callahan, Norv Turner, Art Shell, Lane Kiffin, Tom Cable y Hue Jackson. Previamente, Jon Gruden dirigió por cuatro años completos a Oakland, de 1998 al 2001, antes de mudarse a los Tampa Bay Buccaneers.