WASHINGTON -- Alrededor de media hora antes de que comiencen sus partidos como abridor de los Nacionales en Washington, Stephen Strasburg sale de la caseta y camina por la línea del jardín derecho acompañado del coach de lanzadores Steve McCatty y escucha las ovaciones del público.
Habitualmente McCatty se coloca una toalla sobre el hombro y cuando llegan a la esquina, en lo más profundo del jardín, el derecho de 1,93 metros (6 pies 4 pulgadas) y 104 kilos de peso (230 libras) comienza su estiramiento. Seguramente lanzará una pelota antes de ir al bullpen para calentar en serio mientras McCatty lo observa con los brazos cruzados.
Más tarde, Strasburg se dirige a la lomita para sus últimos lanzamientos de calentamiento. Cuando el cronista presenta a los jugadores finaliza mencionando el apellido del pitcher cuando en el fondo suena la canción "Seven Nation Army" de la banda White Stripes.
Esa escena ya conocida tendrá lugar por primera vez en octubre cuando Strasburg debute en postemporada, probablemente el viernes, en el primer partido de la serie contra Pittsburgh o San Francisco. En septiembre de 2012 los Nacionales lo obligaron a parar para proteger su codo, que había sido sometido a una operación, y no se le permitió lanzar en esa postemporada, una decisión que generó mucho debate.
Los Nacionales no hablan de esa decisión hoy día.
"Está funcionando como se planeó", dijo el gerente general Mike Rizzo, el principal responsable de que Strasburg saliera de la rotación hace dos años, cuando Washington fue eliminado en el quinto juego por San Luis.
El propietario del equipo Mark Lerner dijo que la decisión de sacarlo en 2012 fue "una de las más sencillas que he tomado. Me tardé 30 segundos en decidir".
"No lo lamento. Fue lo mejor para un joven jugador en el largo plazo", dijo Lerner. "Hay muchos que hablan por ahí, está bien. Pero estamos satisfechos con la decisión que tomamos y creo que volveríamos a hacerlo"
La primera selección del draft amateur de 2009 tiene marca de 14-11 con 3.14 de efectividad esta campaña; inició 34 partidos, ha lanzado 215 innings y abanicó a 242 bateadores, en los tres casos las mejores cifras en su carrera. Fue especialmente bueno hacia el final de la campaña para los Nacionales, que ganaron 96 partidos y se llevaron la división Este de la Nacional, al ganar cuatro partidos y lograr efectividad de 1.13, 40 ponches y tres boletos en sus seis últimas salidas.
Cuando se le pregunta por esa decisión, el manager de primer año, Matt Williams dice: "Sin juzgar de una u otra forma, probablemente eso explica por qué está aquí ahora".