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Howard: Potencial y frustraciones

Dwight Howard deja la sensación que puede ser un jugador que limita su entrega. Troy Taormina/USA TODAY Sports

MIAMI -- Dwight Howard es un jugador con potencial ilimitado como pívot dominante, con carisma y un físico meticulosamente perfecto que le permitió disputar 71 juegos o más en nueve de sus diez temporadas en la NBA hasta ahora. Uno pensaría que a esta altura del partido Dwight estaría a la altura de astros como LeBron James y Kobe Bryant en términos de idolatría popular, pero en realidad todo le está saliendo al revés.

Eso se debe a que dos de los tres aspectos previamente mencionados le juegan en contra y a Dwight o no le importa (improbable), él no sabe cómo arreglarlo (dudoso) o es demasiado testarudo como para admitir que hay un problema.

Su legado como basquetbolista está en juego con los Houston Rockets esta temporada, pero nadie parece estar convencido de que él es capaz de repetir lo hecho en el 2009, cuando se puso al Orlando Magic al hombro y lo llevó hasta las Finales de la NBA. Es más, es muy probable que si le preguntas a la gente en una encuesta quién es el líder de los Rockets la mitad de ellos te responderán "James Harden".

Harden obtuvo 85 votos como Jugador Más Valioso la temporada pasada, Kevin Durant ganó el premio con 1232. Howard no recibió ninguno.

Potencial Ilimitado desperdiciado

La capacidad defensiva del tres veces "Defensor del Año" no se discute, su don para bloquear tiros, bajar rebotes y hacer que cualquier oponente piense dos veces antes de penetrar hacia el aro es incomparable.

Sin embargo, él ganó ese prestigioso galardón por última vez en el 2011. Jugadores que la gente considera más "sacrificados" que él como Tyson Chandler, Marc Gasol y especialmente Joakim Noah se lo han llevado a casa durante las últimas tres temporadas.

La gente adora a jugadores como Noah porque exprime su talento al máximo, mientras que la percepción sobre Howard es que él toma su talento innato y lo deja ser, sin voluntad de auto superación.

En sus 10 años en la liga su mejor porcentaje de efectividad en tiros libres ha sido del 67 por ciento cuando él era un novato. Desde ese entonces el pívot de 28 años no ha vuelto a llegar al 60 por ciento, y eso hace que su presencia en los minutos finales de un partido cerrado se convierta en una espada de doble filo.

Su porcentaje de efectividad en tiros de campo del 59,1 por ciento fue el tercer mejor de la liga durante la última temporada regular, pero en el pasado él ya ha superado a esa marca individual en cuatro ocasiones distintas. O sea, ese no es su verdadero techo.

Su repertorio ofensivo es limitado, y eso que él ha trabajado con tutores Hakeem Olajuwon para mejorarlo. El mismo Olajuwon se mostró disconforme el año pasado con el progreso de Howard en noviembre del año pasado.

"Cuando yo lo veo jugar (a Howard), lo que yo veo son oportunidades que él está dejando pasar", dijo la leyenda de la NBA, dos veces campeón y Jugador Más Valioso de la NBA con los Rockets en 1994 y 1995. "Él parece estar tomándose su tiempo para decidir que hacer y adonde ir".

Olajuwon pudo salir campeón cuando Michael Jordan se retiró, Howard se ha pasado una década sin saborear la gloria máxima con Kobe Bryant, LeBron James y los San Antonio Spurs como principales obstáculos.

Al comparar al actual pívot de los Rockets con Olajuwon y otras leyendas de la mejor liga del planeta, algunas que ganaron múltiples anillos y otras que se quedaron en deuda, todos promediaban un doble-doble pero Howard es el único que no roza los 20 puntos por partido tras sus primeras 10 campañas en la NBA.

Promedios por partido tras sus primeras 10 temporadas

Dwight Howard
Puntos:18.3
Rebotes:12.9
Asistencias:1.5
Bloqueos:2.2

Patrick Ewing
Puntos:23.8
Rebotes: 10.4
Asistencias:2.2
Bloqueos: 2.8

Shaquille O'Neal
Puntos:27.6
Rebotes:12.3
Asistencias:2.8
Bloqueos: 2.6

Hakeem Olajuwon
Puntos: 23.7
Rebotes :12.5
Asistencias: 2.5
Bloqueos: 3.6

Kareem Abdul-Jabbar
Puntos:28.6
Rebotes:14.8
Asistencias:4.5
Bloqueos:3.5

También vale la pena destacar que solamente Abdul-Jabbar supera a Howard en el rubro de los rebotes, pero que Howard está último en bloqueos y asistencias.

Grandotes como Shaq y Abdul-Jabbar solían ser excelentes pasadores que a la misma vez se las arreglaban para dominar en el poste bajo. Los pivotes dependen de la generosidad de sus compañeros por naturaleza, pero sí tú logras generar oportunidades para otros tan asiduamente como ellos te ayudan a ti entonces no solo vas a mejorar tus estadísticas personales, sino que vas a elevar al nivel de tus compañeros a la misma vez.

Grandotes contemporáneos de Howard como Tim Duncan y Pau Gasol tienen en común que promedian más del doble de asistencias que Howard en sus respectivas carreras, 3.1 y 3.3 respectivamente. Ellos también han ganado siete campeonatos en los últimos 15 años entre ambos.

Además, Dwight no cuenta con una estirpe de líder actualmente, y ese es su segundo problema.

¿Carisma de líder?

Hoy por hoy tanto Howard como Harden son dos grandes jugadores.

A Howard lo llaman "Superman" por su físico imponente, él hasta se puso la capa durante el Concurso de Volcadas hace unos años. Sin embargo, la característica más importante de Superman no es su capa o su fuerza ilimitada, la gente lo admira porque él salva a todos sin pedir nada a cambio.

Howard se esfuerza tanto pero tanto en ser gracioso, carismático y en caerle bien a la gente fuera de la cancha que quizás esa actitud se percibe como falsa, por más que posiblemente esa percepción sea injusta o equivocada. De alguna manera, Dwight simplemente quiere un abrazo colectivo y saber que es apreciado.

El aprecio de la gente no se gana solamente durante entrevistas y Juegos de las Estrellas, sino que se obtiene a pulso ganándote la admiración de propios y extraños dentro de la cancha misma con victorias y anillos. Eso es algo que por ejemplo LeBron James aprendió hace años y que veteranos como Kobe Bryant y Duncan entienden a la perfección.

Cuando te haces llamar "el mejor pívot" de la liga a ti mismo tras la partida de un compañero pero la historia dice que jugaste para tres equipos (Orlando Magic, Los Ángeles Lakers y Houston Rockets) en las últimas tres temporadas y que no avanzas más allá de la primera ronda de los playoffs desde el 2010, entonces esa proclamación podrá ser verdad pero suena vacía sin hechos concretos para respaldarla.

A esta altura la gente quiere ver a Howard enojarse, reclamar la pelota en el poste bajo y llegar a las Finales sin que le importe lo que otros digan mientras su nivel superlativo eleva al de sus compañeros a la misma vez. Los elogios llegarán solitos junto a los éxitos obtenidos.

Dwight es capaz de dominar un partido o una serie y de estar a la altura de cualquier otro astro de la NBA. Depende de él acabar con una década de frustraciones y críticas para escribir un nuevo capítulo glorioso en su carrera.