LOS ÁNGELES -- Han pasado tres años desde que el sueño de un puñado de jugadores de básquetbol universitario se hizo realidad. La clase del draft de 2011 debe decidir su porvenir antes del 31 de octubre, de lo contrario pasarán a ser agentes libres en julio. El mercado de la NBA muestra su voracidad y en los próximos días se determinará qué jugadores tendrán una temporada sosegada con la seguridad de un buen contrato, quiénes se revalorizarán o qué miembros de la promoción de 2011 le verán los dientes al lobo.
Han sido tres años (resta uno de contrato) en los que muchos de ellos han mostrado un gran crecimiento y en los que otros no han podido cumplir con las expectativas creadas. Queda la eternidad de dos semanas antes de que la noche de Halloween ponga fin a negociaciones e intereses de jugadores y franquicias.
Todo ello en el marco del acuerdo entre la NBA, ESPN y TNT en el que tras la conclusión de la temporada 2015/16, la liga recibirá 24 billones de dólares por los derechos televisivos durante nueve años. Esta circunstancia ampliará el tope salarial y abre las puertas a contratos más suculentos.
Repasemos algunos de los casos más interesantes y qué es lo que les deparará el futuro.
EXPECTATIVAS CUMPLIDAS
Kyrie Irving, Cleveland Cavaliers: Es sin duda alguna uno de los jugadores que ha dado lo que se le pidió. Fue el primero de su promoción en extender su contrato y ya tiene asegurados cinco años por 90 millones de dólares. El premio de su labor con Cleveland Cavaliers le ha llevado a ganarse a pulso una subida del 25 por ciento del incremento salarial.
Aunque algunas voces dictaminen que otros jugadores han hecho una mejor labor en posiciones de draft más altas, el número uno de su clase demostró en su primer año por qué lo fue tras erigirse Novato del Año en 2012. Además participó en Dos Juegos de las Estrellas (2013 y 2014), con un galardón a Jugador Más Valioso incluido en el último año.
Se alzó con otro JMV en su primera experiencia con el Team USA, tras lograr la medalla de oro en el Mundial de España este verano. Sus números en la liga son envidiables: 20.7 ppj, 5.8 apj y 44.7 por ciento en tiros de campo para el armador, que ha sido titular en todos los 181 partidos que ha jugado este año.
Keneth Faried, Denver Nuggets: A punto de firmar un contrato de máximo de 60 millones de dólares por cinco años, se trata de otra de las renovaciones estelares del verano junto a la de Irving. También viene de ganar la medalla de oro en el Mundial de España y de tener una gran actuación. Su permanencia en la franquicia es clave para su carrera y para que Denver vuelva a convertirse en un equipo de garantías para disfrutar de los playoffs, algo que no pudieron lograr la temporada pasada por primera vez en una década.
Markieff Morris, Phoenix Suns: Acaba de renovar por un periodo de cuatro años y 32 millones de dólares. Mejor que su hermano gemelo, Marcus, ha logrado una extensión más que digna para permanecer en los Suns. A partir de esta temporada apuntará a la titularidad debido a la marcha de Channing Frye, algo que le hará tener más peso en el equipo. De los 81 encuentros que disputó el año pasado (13.8 ppj y 6.0 rpj), ninguno fue como titular.
Marcus Morris, Phoenix Suns: El 'pack Morris' se completó con la extensión de Marcus (cuatro años por 20 millones de dólares). La fórmula es sencilla: Makieff más Marcus dan resultado positivo. Ambos juegan bien juntos y dejar marchar a uno hubiera podido afectar al otro. El juego de Marcus mejoró cuando recaló en Phoenix procedente de Houston Rockets, donde su mejor temporada fue su segunda (54 partidos antes de marchar a los Suns en los que logró 8.6 ppj y 4.1 rpj). Junto a su hermano en Phoenix alcanzó el año pasado los 9.7 ppj y 3.9 rpj. Los Morris, mejor juntos que separados.
MERECEN EXTENSIÓN
Kawhi Leonard, San Antonio Spurs: Elegido en el puesto número 15 del draft de 2011, lo suyo ha sido un ascenso meteórico. Aunque el interés en mantener la comunión entre la franquicia y el jugador es un secreto a voces, lo cierto es que ninguna decisión se ha hecho pública. Se intuye una extensión sin estridencias económicas, al más puro estilo Spurs. El único jugador que recibió la extensión máxima fue Tim Duncan en el año 2000, a partir de entonces ninguno otro lo ha logrado y no parece que Leonard lo vaya a lograr.
El alero de los Spurs se ha hecho de respetar con tan solo 23 años de edad. Es uno de los tres jugadores más jóvenes de la historia de la NBA en lograr un JMV en las Finales (2014), el mismo año en que saboreo el éxito de un anillo de la NBA. Su renovación será una realidad y las cábalas apuntan a que podrían ser cuatro años por 40 millones de dólares, veremos cómo manejan la situación los agentes del jugador y la franquicia.
Klay Thompson, Golden State Warriors: Si hay un jugador ansioso por lograr una cuantiosa extensión, ése es el escolta del plantel de la Bahía de San Francisco. También viene de ganar la medalla de oro con el Team USA en el Mundial de España y su balance después de tres años es muy positivo. Sus virtudes en el lanzamiento exterior (44.1 en triples, con 18.4 ppj la campaña pasada) van 'in crescendo' y su aporte apunta más maneras todavía.
Desea la extensión, la tranquilidad de saber que es imprescindible en un equipo joven y con aspiraciones que está esperando a que sus piezas hagan 'click' para llegar alto. El nombre de Thompson sonó para formar parte del cambio con Kevin Love, pero finalmente la franquicia no lo incluyó en una declaración de intenciones. La extensión está al caer, pero tal y como sucede con Leonard, la incógnita reside en las cifras. Por poner en perspectiva, Stephen Curry recibió 44 millones por cuatro años, ¿están esos números a la altura de Thompson?
Tobias Harris, Orlando Magic: Fue llegar a Orlando Magic y besar el santo después de una temporada y parte de otra en Milwaukee Bucks. Traspasado a la franquicia de Florida en febrero de 2013, su participación aumentó considerablemente desde entonces, y sus números lo notaron (15.9 ppj y 7.7 rpj en 33.2 mpj) con respecto a su etapa anterior (4.9 ppj y 2.2 rpj en 11.5 mpj).
El futuro no está claro para un jugador (puesto 19 del draft de 2011) que ha demostrado que puede alcanzar un contrato de cuatro años por más de 10 millones de dólares, precisamente ésas son las pretensiones del ala-pívot.
Kemba Walker, Charlotte Hornets: La franquicia debería retener a Walker para construir un equipo de futuro y con una solvencia relativa. Su gran papel individual en los tres años que lleva en el equipo (16.0 ppj, 5.5 apj en 32.9 mpj) obligan a Charlotte a ir a por el máximo contrato. Aunque no lo valga, aunque su juego no esté a la altura de un Irving. Una de las posibilidades es que la franquicia no le ofrezca una extensión y espere a igualar la oferta de otro equipo cuando e convierta en agente libre restringido. El seleccionado en el noveno puesto en el draft de 2011 ha crecido como jugador y ha cumplido con las expectativas para contar con un buen nuevo contrato.
Jimmy Butler, Chicago Bulls: Se trata de un jugador muy valorado dentro del equipo por compañeros y el propio Tom Thibodeau, coach de los Bulls. Su papel durante las tres temporadas que acumula ha sido más que decente. La campaña pasada fue la mejor de todas (13.1 ppj y 4.9 rpj) y en esta pretemporada está siendo uno de los jugadores más destacados del equipo. Aunque su idea es la de jugar sin preocupaciones, Butler tiene mucho que demostrar. Como suele ser habitual en muchos jugadores, no le suele gustar hablar de las cifras y posibilidades de su nuevo contrato, sin embargo, los Bulls y Butler parecen determinados a continuar con el compromiso y podría haber acuerdo antes del 31 de octubre. La franquicia no querría arriesgarse a perderle al concluir la temporada que viene.
Nikola Vucevic, Orlando Magic: ¿Podría aspirar a un contrato máximo de cinco años por 60 millones de dólares? La gerencia del Magic tiene una difícil papeleta por delante. Las extensiones de Harris y Vucevic no tienen por qué estar relacionadas, pero podrían estarlo. En la franquicia desean mantener a sus dos piezas, sin embargo mucho dependerá de las aspiraciones de un Vucevic que ha sido titular en los 134 partidos en los que ha participado durante las dos últimas temporadas. Durante la campaña pasada fue uno de los jugadores más destacados de la franquicia de Florida (14.2 ppj y 11.0 rpj en 31.8 minutos) y para retenerle tendrán que tirar de billetera.
Brandon Knight, Milwaukee Bucks: Fue elegido en el octavo puesto del draft de 2011 por Detroit Pistons, pero fue traspasado a unos Bucks que necesitan una renovación como el comer. En esta idea de reconstrucción de la franquicia, Knight debería ser una de las piezas intocables ahora que cuentan con el ilusionante Jabari Parker. El esfuerzo económico deberá ser notorio con su base titular y pieza clave del equipo (17.9 ppj - 42.2 por ciento de efectividad en tiros de campo- y 4.9 apj). Le queda mucho margen de mejora y, sobre todo, consistencia. La presencia de Jason Kidd en labores de coach le puede servir a Knight para seguir creciendo.
EN EL AIRE
Derrick Williams, Sacramento Kings: No corren buenos tiempos para el segundo elegido en el draft de 2011. Se esperaba más de un Williams que se marchó de Minnesota Timberwolves por la puerta de atrás y que todavía no ha sido capaz de demostrar por qué salió en la misma posición del draft que años antes había pertenecido a Kevin Durant. Se le acaba el crédito a un Williams por el que no hay indicios de que se le vaya a extender su contrato antes del 31 de octubre. En Sacramento participó más el año pasado que en ninguna de sus tres temporadas anteriores (24.7 mpj), y contó con su mejor efectividad (43.7 por ciento en tiros de campo), sin embargo no llegó a ser el prospecto que todos esperaban. Esta temporada será clave para un jugador que va camino de convertirse en agente libre no restringido.
Iman Shumpert, Nueva York Knicks: Lo tiene complicado para formar parte del proyecto encabezado en la gerencia por Phil Jackson, quien desea tener más espacio salarial de cara a la campaña que viene. La presencia de Tim Hardaway Jr complica las cosas a un Shumpert que ha ido de más a menos hasta alcanzar la peor marca de cualquier jugador de los Knicks la temporada pasada con 6.7 ppj y un 37.8 por ciento de efectividad. Quizás su mayor virtud sea el apartado defensivo, pero tendrá que mejorar su capacidad ofensiva para convencer a una gerencia que, según algunos reportes, no ven con buenos ojos la extensión de Shumpert. Cory Joseph, San Antonio Spurs: A pesar de su calidad, es difícil crecer profesionalmente en a la sombra de Tony Parker y Patty Mills. El canadiense, participó más durante la temporada pasada que en los dos años anteriores (el segundo llegó a jugar varios partidos con los Toros de la D-League. Sin embargo, todo apunta a que este año tendrá una última oportunidad para fraguar la extensión: suplir a Mills mientras se recupera de la lesión en el hombro. El año pasado mejoró su porcentaje anotador (47.5 porciento con 5.0 ppj en 68 partidos) pero la sombra de sus compañeros de posición es demasiado alargada.
Enes Kanter, Utah Jazz: En la franquicia no parece que haya mucho interés en extender el contrato de Kanter antes del 31 de octubre. En la gerencia son conscientes de que la extensión sería merecida para elegido en tercer lugar del draft de su promoción, sin embargo, la incertidumbre de cuál será el tope salarial que salga del nuevo contrato multianual entre la NBA, ESPN y TNT, pone en duda el futuro de Kanter con Jazz. Todo ello a pesar de su marca de 12.3 ppj y 7.5 rpj. Venderlo en la ventana de febrero también parece una opción factible.