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Relación entre ascenso de castigos defensivos y explosión de ofensivas

BRISTOL -- La defensiva de los Buffalo Bills celebró durante quizá dos segundos antes de darse cuenta de la irrelevancia de su reacción.

El esquinero Nickell Robey rompió un pase en tercera oportunidad, lo que pareció detener la ofensiva de los San Diego Chargers en la yarda 32 de los Bills. Parecía que los Chargers iban por el gol de campo largo en una tarde ventosa de la Semana 3. En lugar de eso, se enfilaron con un regalo para primera oportunidad.

Del otro lado del campo, en un área donde el mariscal de campo Philip Rivers nunca volteó a causa de la presión al pase, el profundo de los Bills, Duke Williams, fue señalado por un sujetando defensivo. Williams colocó brevemente su mano derecha en la parte posterior del hombro de Antonio Gates y su mano izquierda en el frente. El torso de Gates giró un poco hacia Williams, lo suficiente para atraer el castigo bajo el énfasis de la NFL este 2014 en contra de impedir el movimiento de receptores elegibles.

"Eso no hubiese sido castigo hace algunos años", consideró el narrador de CBS y ex mariscal de campo Steve Beuerlein durante la transmisión. "Por la regla, eso es castigo, sin duda. Pero sólo se señala en la actualidad".

Y esa ha sido la historia durante las primeras seis semanas de temporada 2014. Los oficiales encauzan la orden de enfatizar tres castigos defensivos, infracciones que el comité de competencia de la NFL consideró suavizadas: sujetando, contacto ilegal y uso ilegal de manos al rostro. Como muestra la tabla de ESPN Stats & Information, se han señalado 619 faltas defensivas esta temporada, 26.6 por ciento más en relación al 2013 y 41 más que el mayor registro previo, a estas alturas, de los últimos 10 años.

El alza en los castigos ha coincidido con una prosperidad en la eficiencia aérea y surge una pregunta: ¿Hasta qué punto hay conexión entre la epidemia de castigos y los elevados números aéreos?

Discutí el asunto con Rivers durante una visita a la práctica de los Chargers el mes pasado. Destacó que la falta de los Bills es un ejemplo del arbitraje este 2014, pero se preguntó si se han marcado suficientes de esos castigos --contacto menos lejos del balón-- para indicar un cambio radical. El mayor impacto, sugirió Rivers, puede venir en la forma que las defensivas se ajustarán.

"No sé si ya lo podemos notar", dijo Rivers. "Quizá contra Buffalo, cuando nos marcaron a favor un ligero contacto sobre Gates y estaba lejos de la jugada, sentí como, 'vaya, está bien. Eso no se ve muy seguido'. Pienso que es muy pronto para saber con certeza.

"Sí te preguntas si se permite que ciertas cosas salgan más limpias, porque los jugadores defensivos juegan con mayor cautela [para que los árbitros] no los castiguen. Es difícil documentarlo. No he llegado al punto de decir que están marcando diferente. No lo he visto aún".

Esa respuesta expone el área gris que la NFL quiere esclarecer con su énfasis de ahora en adelante: alejar a los defensivos de ciertas técnicas sin que cambie el flujo fundamental en el resultado de los partidos.

Durante una entrevista reciente con la Associated Press, el vicepresidente de arbitraje de la NFL, Dean Blandino, dijo que el incremento de castigos no lo sorprende. "Estamos en buena posición", dijo Blandino, y añadió que, "no veo un producto minimizado en el campo".

Eso podría ser difícil de digerir para los aficionados, quienes ya tienden al escepticismo hacia los oficiales o están hartos de las interrupciones. Como ejemplo, el partido entre Bills y Chargers arrojó 20 castigos (entre aceptados y rechazados), pero su duración de 184 minutos estuvo en el promedio de la NFL durante la última década.

Pueden existir muchas otras razones por el alza en los números aéreos. La más significativa es una tendencia clara hacia los pases dentro de las primeras 5 yardas. Son más fáciles de completar, menos probables de dejar caer y reducen el riesgo de capturas. Lo más importante: ocurren dentro del rango donde una de las reglas reforzadas --contacto ilegal-- sigue permitiendo a los defensivos tocar al rival.

Al final, es justo incluir los puntos de énfasis de la temporada actual como parte de una historia más amplia, la cual tiene múltiples tentáculos. Es por mucho el más emocional de los factores contribuyentes, pero su existencia es más fácil de documentar que su impacto.