¿Puede alguien ser apreciado y subestimado a la misma vez? ¿Ser reconocido mientras siempre vive a la sombra de alguien más? Esa parece ser la historia de Sergio Agüero, el delantero del Manchester City que se despachó con cuatro goles en un mismo partido por primera vez en su carrera este sábado contra el Tottenham.
El Kun demostró que no solo es el mejor jugador del campeón defensor de la Liga Premier de Inglaterra, sino que también es el mejor jugador de la liga inglesa y posiblemente del mundo, a la misma altura que astros del planeta fútbol como Lionel Messi, Cristiano Ronaldo y Franck Ribery.
Agüero demostró el tipo de efectividad que lo podría catapultar a ser nominado al Balón de Oro esta temporada. Tengamos en cuenta que el goleador del City jamás formó parte de los tres finalistas del máximo galardón individual del fútbol mundial, pero el 2015 podría ser el año en que eso cambie si él sigue desplegando este nivel superlativo dentro de la cancha.
El delantero de 26 años de edad tuvo una tarde inolvidable contra un rival de peso como los Spurs, quienes llegaban a ese partido en sexto lugar con 11 puntos. Agüero fue el máximo responsable de la goleada de su equipo por 4-1. Como si un poker de goles no fuese suficiente, él también provocó el penal que derivó en su tercer tanto y la expulsión de un defensor rival en esa misma jugada. Simplemente soberbio.
Gracias a él, el Manchester City no pierde de vista al Chelsea en la cima del campeonato local y no se altera cuando sufre bajas sensibles como por ejemplo la de Frank Lampard por lesión, ya que es capaz de participar en la generación del juego además de terminar la jugada que él mismo empezó si es necesario.
Es más, el artillero argentino pudo haber tenido una jornada verdaderamente histórica anotando cinco o seis goles contra el Tottenham, ya que él se erró el segundo de los tres penales cobrados para el City en el primer tiempo y tuvo cuatro chances clarísimas adicionales de gol. Tres de ellas fueron tapadas por el arquero visitante Hugo Lloris y en la otra no llegó a empujar la pelota en soledad por el segundo palo con Lloris ya vencido.
O sea, Agüero contó con nueve oportunidades en 90 minutos y mandó cuatro de ellas a guardar. Él fue el Terminator de las redes contrarias, sin piedad ni consideración por la humillacion de la defensa rival
El Kun probablemente sea el tercer delantero más popular de su propio país detrás de Messi y Carlos Tévez, pero él demostró su vigencia al superar a Tévez como máximo goleador del la historia del City en la Liga Premier (60 a 58) con sus 90 minutos de antología contra el Tottenham.
Eso sí, en Twitter algunos le siguen recriminando por qué no jugó así con la Seleccion Argentina en la final del Mundial contra Alemania. El pasado no se puede cambiar, pero un mejor presente y futuro si se pueden forjar a fuerza de goles y títulos.
Agüero también vive a la sombra de Diego Costa, el actual goleador del Chelsea que al igual que él supo ser ídolo del Atlético Madrid antes de desembarcar en la Premier League para llevarse todos los elogios.
Bueno, el goleador del City no solo alcanzó a Costa momentáneamente en la cima de la tabla de goleadores de la liga con nueve goles en ocho partidos, un promedio de más de uno por encuentro, sino que Costa jamás ha anotado más de tres goles en un partido en su propia trayectoria hasta ahora.
Todo parece indicar que Agüero está destapándose con una temporada digna de una superestrella, de un delantero de elite. Ya es hora de reconocerlo verdaderamente como tal.