CARSON -- Gennady Golovkin continúa a un ritmo imparable. Su victoria ante Marco Antonio Rubio supuso su decimoctavo nocáut al hilo y, además de retener sus títulos de la Asociación Mundial de Boxeo (WBA) y de la Organización Internacional de Boxeo (IBO), se alzó con el cinturón interino de Consejo Mundial de Boxeo (WBC). El incontestable triunfo sobre el mexicano le mantiene invicto con un balance de 31-0 y 28 KOs.
El púgil de Kazajistán no dio opción a su rival y ya piensa en seguir construyendo su leyenda. Las opciones de futuro son muchas, sin embargo el nombre que más repite es el de Miguel Cotto.
"Tengo tres cinturones, quiero luchar contra cualquiera. Miguel Cotto, Canelo Álvarez, por supuesto, Chávez JR también. Quiero pelear", afirmó. "Respeto a Miguel Cotto es el mejor y quiero pelear contra el mejor".
Aunque sea difícil que el boricua acepte el reto, lo cierto es que los esfuerzos de los promotores y el equipo de Golovkin serán los de gestionar y preparare para verse las caras contra Cotto o alguno de los boxeadores de mayor calado. Hasta el momento, lo único que se sabe es que el kazajo peleará en Europa en enero y en Estados Unidos en mayo.
Abel Sánchez, coach de Golovkin dejó claro lo que quiere su pupilo.
Quiere que se decida quién es mejor en 160 libras. Pensamos que Cotto nunca querrá pelear con Gennady. Creo que con Chaves también sería gran pelea. Chávez Jr pelearía con su papá", afirmó Sánchez aludiendo a las similitudes de Golovkin y el excampeón.
El dominio de Golovkin sobre Rubio fue inevitable. El boxeador de Torreón ya dejó muy malas sensaciones la jornada anterior tras sobrepasar el límite de peso en casi dos libras. Allí perdió su título interino y ya no podía optar a nada. Durante el combate tuvo que acatar los envites de su rival, hasta que transcurrido un minuto y 19 segundos recibió dos golpes de derecha que le amuermaron y un gancho de izquierda en la cabeza que le llevó a la lona.
"No fue una gran sorpresa", explicó Golovkin. "Estaba al cien por cien gracias al trabajo duro. Es buen peleador, pero de otra clase. A mí me da igual golpear con la izquierda que con la derecha, tan solo necesito una oportunidad para noquear", agregó.
Sánchez, en cambio, sí supo definir cuál de los dos brazos es el más efectivo.
"Es mas fuerte con la mano derecha. Con la izquierda también, obviamente hoy le noqueó con esa".
Son muchas las virtudes de Golovkin. Una de las más notorias es la humildad que refleja. A pesar de que el público asistente a la velada era mayoritariamente de origen mexicano, Rubio acaparó los silbidos de varios sectores y la gran mayoría de las ovaciones fueron a parar al kazajo.
"El fanático mexicano latino está esperando a alguien como Zárate o Zamora, esos boxeadores que se fajaban y le daban al público lo que esperaba. El público quiere ver peleas, no danza. Si llega a la altura de pelear como esos grandes veremos un campeón de salón de fama", previó Sánchez.