Carlos A. Nava 9y

Gigantes atacó desde el principio

KANSAS CITY -- Esta vez, los Gigantes de San Francisco comenzaron temprano y terminaron pronto el partido.

Tres carreras cuando el pítcher abridor Madison Bumgarner ni siquiera pisaba el terreno de juego abrieron el camino para que los Gigantes vencieran 71 a los Reales de Kansas City, en el primer juego de la Serie Mundial.

Ni siquiera fueron necesarios errores del rival, ni lanzamientos salvajes, ni llegar a las entradas extras para que San Francisco luciera gigante de principio a fin y propinara la primera derrota de la actual postemporada a los Reales.

Gregor Blanco abrió con sencillo un ataque tempranero de los Gigantes que abrió el camino para el resto de sus compañeros.

"Ese es mi trabajo como primer bate", dijo Blanco en el clubhouse de los Gigantes. "Mi trabajo es tratar de generar desde el principio y que de ahí parta todo. Cuando me dieron el bate yo estaba concentrado".

"Las cosas nos salieron bien en esa primera entrada", agregó. "Después vino (Madison) Bumgarner a hacer lo que sabe hacer y ha hecho todo el tiempo, en especial en postemporada".

Los 40,459 aficionados que estaban en el Kauffman Stadium y muchos más en Kansas City se dieron cuenta de que frente a los Gigantes cualquier jugada, ofensiva y defensiva, será aprovechada.

Blanco conectó imparable en esa fatídica primera entrada y después se dejó ir a segunda en un elevado al central en el Lorenzo Cain pareció descuidarse por unos instantes, al dar la espalda a la jugada en el cuadro.

Buster Posey adelantó con sencillo a Blanco hacia la antesala y Pablo Sandoval lo puso en home con doblete.

Hunter Pence se llevó a Sandoval por enfrente con cuadrangular.

Fue el tercer cuadrangular de los Gigantes en partidos consecutivos, incluyendo el definitivo de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional, después de que en todos los partidos anterior de la actual postemporada, apenas sumaban dos palos de vuelta entera.

"Que los batazos salgan como Dios quiera, jonrones o hits", dijo Sandoval. "Si son hits o jonrones bienvenidos".

Del resto se encargó Bumgarner, quien lanzó pelota de tres imparables con cinco ponches en siete entradas completas, hasta que salió después del jonrón de Salvador Pérez, que evitó la blanqueada de los Reales.

Bumgarner frenó en 32 entradas y dos tercios sus entradas consecutivas sin recibir anotación en playoffs como visitante.

En su reemplazo entraron Javier López y Hunter Strickland para terminar el partido sin mayores problemas.

"Madison es un artista", dijo López. "Salió tranquilo, colocó sus lanzamientos.
Realizó el plan de pitcheo a la perfección y se acabó. Así es él".

En cambio, el abridor de los Reales, Shields, apenas duró tres entradas, en las que fue castigado con siete imparables, cinco carreras, incluyendo cuadrangular.

"Vino con un mal día, simplemente", consideró el cátcher de los Reales, Salvador Pérez. "Cualquier pítcher puede tener un mal día. Traía sus pitcheadas, tiró strikes. Se estuvo fajando hasta donde pudo. Pero ya vieron los resultados..."

Ahora los Gigantes siguen con su buena racha en partidos inaugurales de playoffs fuera de casa; la última vez que perdieron fue en 1997 y en general han ganado 16 de 18 partidos en esta instancia.

El ganador del primer juego ha ganado 10 de las últimas 11 series mundiales.

"Siempre será una buena manera de comenzar esto, sacando al as de su rotación temprano", dijo Blanco. "Pero esto sólo fue un partido, el primero, y es una serie larga".

"No nos confiamos, mañana tenemos que venir concentrados, porque ellos no quieren irse a San Francisco dos juegos abajo", añadió.

El segundo partido del Clásico de Otoño se disputará este miércoles en el mismo Kauffman Stadium de Kansas City.

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