Jordi Blanco | Corresponsal 9y

A Espanyol le ahoga la economía

BARCELONA -- Estrangulado por una deuda superior a los 140 millones de euros, el Espanyol debe pagar 15 a Hacienda antes de acabar esta temporada para cumplir los plazos marcados por el fisco. En noviembre tiene previsto un primer pago de 6 millones y de otros 9 en marzo. La situación financiera del club blanquiazul se adivina insostenible y ha comenzado a provocar que en el entorno se especule con traspasos para aliviar el panorama.

Héctor Moreno, cuya recuperación total se espera para el mes de febrero, y Kiko Casilla apuntan como los dos nombres destinados a ofrecer liquidez a final de curso a través de sus ventas, cada vez más decididas en el club.

José Luis Morlanes, vicepresidente periquito, ya calificó la situación de "insolvencia técnica" hace meses, pero el descenso en el número de abonados y la imposibilidad de conseguir ingresos extraordinarios no ha hecho más que empeorar la situación.

El presupuesto para el primer equipo (18 millones de euros) ha descendido por tercer año consecutivo y en la Junta General de Accionistas que se celebrará el próximo primero de diciembre se anunciará la necesidad de frontar algunos traspasos al acabar la temporada para paliar un déficit que empieza a ahogar el día a día del club.

TRASPASOS Y RECORTES
Así, fuentes próximas al Espanyol no han ocultado que si el pasado verano se recibió como un golpe bajo la grave lesión que sufrió Héctor Moreno, ahora ya se trabaja pensando en su traspaso. Los últimos informes médicos coinciden en que la recuperación del central mexicano sigue los plazos y que podrá acabar la temporada a pleno rendimiento.

Y será entonces, en junio, cuando el club esté dispuesto a ponerle en el mercado, se espera que por unos 10 millones de euros. Junto a él, Kiko Casilla es el mejor activo de la plantilla y se tiene constancia del interés de algún club de la Premier.

A través de sus ventas y de recortes de todo tipo, el Espanyol confía en aligerar sus problemas de tesorería para hacer frente a los pagos con Hacienda, aunque contemplando el futuro cada vez con menos ambición.

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